Perú asumirá el duro reto de ser la única sede del ya tradicional evento de motores, a inicios del 2019

El Rally Dakar número 41 se llevará a cabo del 6 al 17 de enero de 2019, totalmente en suelo peruano. Chile, Bolivia y Argentina han renunciado a la organización, por lo que los incas alzaron la mano para tomar el reto de hacerlo solos. Para la empresa francesa Amaury Sport Organisation (ASO), así como para los países que han quedado fuera de la organización, esto ha sido un golpe mediático. Esto se debe a que para Sudamérica, la competencia ha representado desde 2009 un orgullo para su deporte, así como un beneficio enorme para el turismo y la economía de la región.

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Por lo general, a finales de marzo de cada año se hacía el anuncio sobre el recorrido y los pormenores de la organización, pero este año ha sido distIGNORE INTO. Las negociaciones para llevar a cabo la competencia no rindieron frutos y uno a uno se retiraron los organizadores convencionales. Chile argumentó a través de su Ministra de Deportes, Pauline Kantor, que la razón de su retiro eran problemas presupuestarios. Esto se debe a los recortes del actual gobierno por 4,600 millones de dólares hasta 2021, anunciados por el Ministro de Hacienda a principios de mayo en conferencia de prensa. Además, el rally ha recibido críticas en años anteriores por el maltrato al patrimonio cultural y natural, especialmente en el desierto de Atacama, un ecosistema considerado frágil, de acuerdo con información de Telesur.

Bolivia también argumentó problemas de presupuesto. Sin embargo, igualmente trascendió que no llegaron a un acuerdo sobre la ruta. El gobierno de Evo Morales, a través de la Ministra de Turismo, Wilma Alanoca, argumentó que deseaba que el rally pasara por la región amazónica del país y no por la andina como ha sido tradicionalmente, según información del diario peruano Gestión. El objetivo era que la carrera se sumara a los planes del gobierno en la promoción de su diversidad natural y cultural. No obstante, Bolivia deja abierta la puerta para volver en 2020, pues el rally representa alrededor de 150 millones de dólares a su paso por el país.

El caso de Argentina también se explica por las mismas razones: los problemas de presupuesto. Según el diario La Nación de Argentina, ha habido protestas recurrentes sobre el maltrato a los ecosistemas, la inversión del gobierno y los daños al patrimonio del país. Por si fuera poco, Ecuador postergó su participación como organizador hasta 2020. Acoger la competencia es una tarea difícil debido a factores como la inversión para organizarlo, la infraestructura, servicios, seguridad, patrocinadores, logística y otros aspectos que deben ser cubiertos.

Perú será el anfitrión solitario de 2019, que tendrá 10 etapas que correrán por sus desiertos. El ex presidente del Instituto Peruano del Deporte (IPD) declaró al diario Expreso de Perú que al menos dos etapas se deberían correr en el norte del país, golpeada el año pasado por el fenómeno del “Niño costero”. Esto se debe a que llevar el rally a esta zona traerá beneficios a la población afectada y al mismo tiempo dará a la carrera nuevos horizontes con paisajes únicos. Así pues, el gobierno peruano tiene en la mira promocionar su turismo a través de sus riquezas naturales y culturales. La gran premiación será el 18 de enero, fecha que coincide con la fundación de Lima en 1535, lo que seguramente será una gran celebración.

El Rally Dakar cumple ya 10 años en Sudamérica, después de dejar Europa y África por amenazas terroristas. En Sudamérica ha encontrado un nuevo hogar con gran éxito, a pesar del tropiezo de este año en cuanto a la organización. Con la posible incorporación de Ecuador y el interés de Colombia en la ruta incrementaría la sostenibilidad de la carrera, además de hacerla más atractiva por su diversidad natural. Por lo pronto, Perú tendrá su rally, competencia que el país esperará con ansias.

Latin American Post | Luis Angel Hernández Liborio

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