Nuevo vicepresidente ecuatoriano: ¿la tercera es la vencida?

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En menos de dos años, dos vicepresidentes ecuatorianos han prescindido del cargo tras tener escándalos de corrupción

El pasado 4 de diciembre, María Alejandra Vicuña, ex vicepresidenta de Ecuador, presentó su renuncia mediante un comunicado oficial, en donde afirmó que “ (…) presentaré mi renuncia irrevocable a mi cargo pues prefiero que él (refiriéndose a Lenin Moreno) pueda contar con alguien más para que asuma definitivamente las grandes responsabilidades que me encargó".

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Ante la salida de Vicuña, Lenin Moreno tuvo que -nuevamente- presentar una terna con el nombre del futuro vicepresidente, entre los posibles aspirantes estaban Nancy Vasco, Agustín Albán y Otto Sonnenholzner. Resultaba interesante que los tres nombres escogidos no tenían relación con la política. El Comercio explica esto afirmando que, “se habló en días pasados de un perfil apolítico, por encima de figuras de la vida nacional o políticos de dentro y fuera del Gobierno”.

El elegido fue el economista, radiodifusor y empresario Otto Sonnenholzner, y obtuvo 94 votos a favor en el Congreso. Inmediatamente asumió su cargo, y en el juramento ante el Congreso afirmó que, “garantizo que siempre primará el interés nacional  sobre interese particulares o de cualquier grupo político o económico. De igual manera, invitó a volver a confiar en las instituciones, “tenemos que volver a creer, a confiar. Porque les garantizo que si así lo hacemos vamos a salir adelante".

Los ex-vicepresidentes

María Alejandra Vicuña está siendo investigada judicialmente por el denominado Caso Diezmos, luego de que fuera acusada por su ex asesor Ángel Sagbay, de exigirle dinero a cambio de que él se quedara en el cargo, cuando Vicuña era asambleísta entre 2012 y 2014, como lo recuerda El Universo. Al enterarse de la denuncia, Vicuña argumentó que Sagbay, “hasta hace poco exigía cargos públicos, contratos, préstamos de dinero y ahora es el adalid de la transparencia”, según El Comercio.

A pesar de defenderse, Vicuña tuvo que renunciar a su cargo y dejar que la investigación siguiera su curso.

Por otra parte, el ex vicepresidente Jorge Glas fue retirado de su cargo al presentarse por ciertas diferencias con el presidente. Glas, vinculaba al presidente Moreno en unos audios que lo involucraban en el caso de Odebrecht.

A raíz de esto, se le tuvo que dictar una orden preventiva. Después, Glas fue condenado a 6 años de prisión por vínculos con la empresa brasileña Odebrecht. Según RT, “el 3 de enero de 2018, el presidente Moreno informó que el vicepresidente Glas había cesado sus funciones de manera definitiva”.

A finales de octubre, Glas inició una huelga de hambre, en forma de protesta ante su injusto encarcelamiento. Sin embargo, por su delicado estado de salud, tuvo que ser trasladado al centro de Rehabilitación Social de Latacunga.

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¿Acercamientos a los medios de comunicación?

Sonnenholzner es actualmente director de la radio Tropicana FM de Guayaquil, además de ser parte de la Asamblea Ecuatoriana de Radiodifusión (AER).  Es claro que con la elección de un vicepresidente cercano a los medios de comunicación, Moreno sigue intentando quitar esa marca que lo persigue: tener algún parecido con el expresidente Rafael Correa.

Recordemos que en su gobierno trataba a los medios como “prensa corrupta”, e inclusive ganó un juicio contra los directivos del diario El Universal, por la publicación de una columna “sobre la revuelta policial que tuvo lugar en el país suramericano ese mismo año, la cual el mandatario calificó de ‘ofensiva’”, recuerda El Imparcial.

¿Será el último vicepresidente?

El gobierno de Moreno va hasta el 2021, por lo que Sonnenholzner estará en el cargo durante un poco más de 19 meses. Sin embargo, y tras una semana como funcionario, a Sonnenholzner ya le han acusado de estar involucrado en un par de escándalos.

Por un lado, está la evasión de impuestos. La acusación realizada por el magistrado de la Corte Nacional de Justicia, Juan Francisco Morales, expresa que en 2017, el nuevo funcionario pagó una renta de USD 46.86, infringiendo el artículo 83, donde todos los ecuatorianos tienen que pagar los atributos establecidos por la ley.

Otra de las acusaciones, la revela el diario El Universal, dice que dos de las empresas manejadas por Sonnenholzner tuvieron contratación directa con el Estado. Esto no lo permite la constitución ecuatoriana, porque en el artículo 113 se lee que:

“No podrán ser candidatas o candidatos de elección popular: Quienes al inscribir su candidatura tengan contrato con el Estado, como personas naturales o como representantes o apoderados de personas jurídicas, siempre que el contrato se haya celebrado para la ejecución de obra pública, prestación de servicio público o explotación de recursos naturales”.

A pesar de que solo lleva una semana en su cargo, es muy pronto para predecir su futuro. Si bien ha sido acusado por dos violaciones a la constitución ecuatoriana, habrá que esperar si las denuncias prosperan o si, de lo contrario, no resultan tan importantes dentro del nuevo cargo de este empresario.

LatinAmerican Post | Laura Viviana Guevara Muñoz

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