La perfección a través de la diversidad

Para sacar adelante nuestra sociedad debemos empujar todos de manera pareja, ir para el mismo lado o cantar, en lo posible, la misma canción. Nuestro lenguaje cotidiano está lleno de metáforas referidas al modo en que los seres humanos debemos interactuar de manera coordinada para lograr determinado objetivo. Pero ¿cómo lograrlo? ¿Es necesario que pensemos exactamente de la misma manera? ¿Qué importancia tiene la diversidad? La ciencia tiene que decir al respecto.  

Un grupo de científicos de la universidad Northwestern (Illinois, Estados Unidos) ha demostrado lo que hasta ahora se creía indemostrable: que las entidades que interactúan en ciertos sistemas solo pueden sincronizarse si son diferentes entre sí.

Cómo interactúan las partes de algunos sistemas

El profesor Adilson Motter, quien dirigió la investigación, explicó que las partes idénticas que componen ciertos sistemas tienden a comportarse de manera diferente cuando interactúan. Este fenómeno genera una pérdida de sincronización. El sistema, compuesto de partes perfectas, se vuelve imperfecto.

Sin embargo, las entidades vuelven a comportarse de manera idéntica cuando se introducen pequeñas diferencias entre sí. El sistema recupera la perfección debido a la diversidad de sus partes.

Para realizar el experimento, que fue publicado en la revista Nature Physics, los investigadores utilizaron tres generadores eléctricos. Por separado, cada uno de ellos oscilaba a una frecuencia de 100 ciclos por segundo. Sin embargo, cuando se los conectaba para formar un triángulo, sus frecuencias divergían. En cambio, si la disipación de los generadores se ajustaba a diferentes niveles, la frecuencia volvía a ser idéntica.

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Implicaciones del descubrimiento

De acuerdo con el artículo de la universidad Northwestern, este descubrimiento podría utilizarse para optimizar varios sistemas. Un ejemplo de ello son las redes eléctricas, en las que se requiere que muchas partes interconectadas se sincronicen de manera perfecta. Además, podría ser importante para entender el comportamiento colectivo de otros sistemas que se encuentran en la naturaleza (pensemos, por ejemplo, en las luciérnagas, que destellan al unísono aunque los individuos que componen el grupo sean diferentes). Incluso podría ser valioso para comprender la manera en que los seres humanos reunidos logran ponerse de acuerdo y actuar de manera sincronizada a pesar de la diversidad de criterios… o justamente gracias a eso.

En ese sentido, el equipo de investigadores se ha propuesto estudiar las implicaciones de su hallazgo en diversos sistemas tecnológicos, biológicos y sociales. En la actualidad, trabajan en el diseño de una red eléctrica que sea más estable y que permita la incorporación progresiva de energía proveniente de fuentes renovables.