¿Cómo afecta la pirotecnia durante las fiestas?
Con Navidad y Año Nuevo cada vez más cerca, nuevamente surgen recomendaciones para tener una celebración “más responsable”.
La industria de la pirotecnia se prepara para cambios y concientización de la sociedad hacia su uso. / Foto: Pexels
LatinAmerican Post | Ariel Cipolla
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Read in english: How does fireworks affect the holidays?
Navidad y Año Nuevo implican celebraciones alrededor del planeta. Cada país tiene sus costumbres, pero lo cierto es que hay una tradición que parece estar desde siempre con nosotros: los fuegos artificiales. Ya sean a gran escala o a través de una simple pirotecnia, históricamente fue habitual que esa sea la época en la que empiezan a venderse en ka mayoría de los países.
No obstante, en los últimos años comenzaron a circular distintas campañas para la concientización de una celebración sana. Por ejemplo, se dice que la pirotecnia afecta enormemente a los niños con autismo e incluso a las mascotas, por lo que el uso también comenzó a bajar enormemente, especialmente en nuestra región.
Esto se puede ver, por ejemplo, en la baja cantidad de heridos por pirotecnia luego de las fiestas. Por ejemplo, en Argentina, durante el vigente año, el Gobierno resaltó la cifra “más baja en años” de pacientes que tuvieron que ingresar a la sala de urgencias. Lo cierto es que se trata de una situación delicada, que afecta tanto a los humanos como a los animales y al medioambiente.
La industria de la pirotecnia y sus consecuencias
La industria de la pirotecnia es un enorme negocio global. Desde NY Times informan que se encuentra dominado por las manufactureras chinas, llegando a mover alrededor de 12 mil millones de dólares anuales. Sin embargo, el uso de esta industria puede ser letal: en América Latina, por ejemplo, se registran cientos de incendios o heridos a causa de un mal uso de los fuegos artificiales o, simplemente, de infortunios.
Además de lo peligroso que puede ser para las personas, también causa molestias para los animales. Así, vemos que en la Argentina está avanzando un proyecto para regular el uso de la pirotecnia a nivel nacional, de forma tal que no se prohíba, sino que se bajen los decibeles del sonido para que deje de ser dañina auditivamente.
Esto mismo se buscaría aplicar en Brasil, aunque a una escala mayor: se quieren prohibir todos los fuegos artificiales que produzcan ruidos, con unas posible prisión desde tres meses a un año a todos los que la violen. Esta es una medida similar a la que tiene Chile, desde los finales de los 90 donde se prohíbe la comercialización y el uso de fuegos artificiales en el territorio.
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No obstante, ¿qué es lo que sucede en relación con el medioambiente? Pues bien, desde Greenpeace especifican que tienen un lado realmente negativo: la contaminación. Desde el olfato podemos percibir que hay aromas antinaturales, ya que se puede sentir la polución que genera una mezcla de nitratos, sulfatos y percloratos en fórmulas de sodio.
Del mismo modo, la mezcla provoca que haya una escasa visibilidad y una sensación constante de neblina. Como hay una enorme cantidad de humo en el aire, también puede afectar a los seres humanos al inhalarlas. Incluso, el CO2, gas sin color ni olor, puede generar un malestar súbito por envenenamiento, llegando a causar la muerte.
El ciclo de lluvias también puede modificarse por los efectos de la pirotecnia. Un estudio a cargo de la Facultad de Geografía de la Universidad Autónoma del Estado de México reveló que los cohetes lanzados al aire provocan un retraso en el ciclo de las lluvias, lo cual deriva en una contaminación atmosférica, ya que los cohetes disipan el aguacero y desvanecen las gotas de agua con las que se crean la nube.
Al mismo tiempo, como indicamos, supone un gran peligro para la fauna y la flora. Los animales perciben los sonidos de una forma mucho más aguda. Mientras que para la vegetiación es habitual que, por una mala manipulación de los cohetes o el factor del azar, se produzcan incendios en zonas forestales.
Por eso, la idea de que exista una “pirotecnia cero” irá de la mano con la concientización de la sociedad, pero también con las políticas públicas que puedan generar los países para entender lo grave que puede ser la situación. Si bien, con el correr del tiempo, nos acostumbramos a que la cantidad de fuegos artificiales se reduzca, podemos cambiar las tradiciones para evitar accidentes.