¿Qué cambia en el mundo con una Bitcoin, cada vez más consolidada?

El visionario Elon Musk no deja de sorprender al mundo. En los últimos días ha llamado la atención su nueva estrategia empresarial de invertir desde su compañía Tesla, la millonaria suma de 1.500 millones de dólares en criptomonedas. A raíz de esta decisión se han planteado muchos interrogantes, pues esto hizo que el precio del bitcoin alcanzara valores récords que ya superan los 46.000 dólares en la Bolsa. Según el visionario, lo que busca con esta gran inversión es que se tenga mayor flexibilidad y así diversificar los rendimientos en efectivo, asegurando que se debió invertir mucho antes en este sector.

Por otro lado, abrió la puerta para aceptar el bitcoin como método de pago en la comercialización de sus vehículos. Sin embargo, el anuncio de Musk entra al debate sobre las consecuencias que tendrá en las criptomonedas y el comportamiento de este sector en la Bolsa de Valores.
 

¿Tendrán mayor validez?

Gabriel Makhlouf, miembro del consejo de gobierno del Banco Central Europeo, recuerdó en una entrevista dada en enero para Bloomberg que todas las inversiones que se hagan en bitcoin no son seguras y quienes optan por ellas deben prepararse para perder todo su capital. Según sus declaraciones no se entiende cuál es la razón de la inversión en un negocio en el que básicamente no hay certeza de nada. 
De la misma manera, Christine Lagarde, actual presidenta del BCE y ex directora el FMI, también ha dicho en un evento de Reuters Next que criptomonedas como el Bitcoin no tienen una base sólida y por eso mismo la ha calificado como un “activo altamente especulativo”, debido a su comportamiento poco fiable. 

Ahora bien, el bitcoin es considerado una criptomoneda muy volátil por lo que este acontecimiento puede llegar a preocupar a muchos inversores, sobre todo a aquellos que son conservadores y Tesla tendría que asumir esos riesgos, manifiesta el analista jefe de mercado de Markets.com, Neil Wilson. 

Por el momento, bitcoin y otras criptomonedas han aumentado su cotización en valores nunca antes vistos pero su extremado comportamiento volátil y su poco respaldo de los bancos centrales no podrían garantizar a largo plazo la misma validez que tiene ahora.

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¿Perderán los Bancos Mundiales el control de los mercados?

Los Bancos Mundiales siguen teniendo el dominio de las monedas y divisas existentes, además del control de todos lo movimientos que se hagan en el sector político y económico. Difícilmente se podría hablar de que las criptomonedas vayan a reemplazar al banco tradicional por la decisión de Elon Musk y la valorización que produjo su inversión en bitcoin. La razón por la que es poco probable que esto suceda es porque a los bancos les gusta el dinero y a eso se debe su propia existencia. En cambio, las criptomonedas pertenecen a los medios digitales que evaden el control de los Estados y todas las entidades que se encargan de supervisar los mercados financieros en el mundo, por lo que también es común que se utilicen para la venta de drogas y armas sin dejar rastro.

Aunque para algunos estos medios de intercambio digitales es un hecho esperanzador porque su filosofía es liberar a las personas del sistema financiero que siempre ha existido y que ha sido considerado como opresor, dicho sueño está lejos de hacerse realidad, debido a que las grandes potencias del planeta han rechazado fehacientemente su implementación.  

¿A quién beneficia?

El Premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, en su momento aseguró en Bloomberg Television con Francine Lacqua y Tom Keene: “Bitcoin tiene éxito solo por su potencial de elusión, falta de supervisión, por lo que me parece que debería prohibirse. No cumple ninguna función socialmente útil “.

En otros términos, lo que trata de decir Stiglitz es que las criptomonedas son básicamente una burbuja que juega con las emociones de la gente mientras tiene un efecto montaña rusa. Por ende, no beneficia a nadie, tal vez tenga algunos efectos positivos en ciertos aspectos mientras está al alza y es el mejor método de transferencia para quienes practican actividades ilícitas. En los países con hiperinflación se ha visto como una manera optimista para salir en la crisis. Los bancos no le dan respaldo y con el apoyo de los Estados no tienen razones para permitir que sean aceptadas oficialmente. En conclusión, los usuarios son quienes corren el mayor riesgo de perder sus inversiones en un sistema lleno de incertidumbres y que siguen siendo distante una plena aceptación de su uso. Aunque, es verdad que sigue sorprendiendo cada vez más y ganando adeptos relevantes como el de Musk.