Godzilla vs Kong: la película que finaliza el MonsterVerse de manera espectacular

Godzilla vs Kong es uno de los acontecimientos cinematográficos del año. Desde hace tiempo se venía anticipando este enfrentamiento final entre dos bestias que representan una parte muy grande de la cultura pop, motivo por el cual esta película final tenía a los espectadores a la expectativa por ver quién sería el ganador.

De hecho, en las redes sociales, los usuarios se manifestaron a favor de uno de los dos monstruos. Los hashtags #TeamKong o #TeamGodzilla generaron un debate entre las personas que, con determinados argumentos u opiniones, apoyaban a uno de los dos protagonistas de esta película dirigida por Adam Wingard.

Teniendo en cuenta que es la película número 36 de la franquicia de Godzilla y la número 12 de King Kong, se esperaba que la producción pudiese honrar el legado cinematográfico que cargaban a sus espaldas. Lo cierto es que no solamente cumplieron con las expectativas, sino que también las superaron. Veamos por qué.

Godzilla vs. Kong

Este enfrentamiento venía palpitándose desde hace dos películas. Hablamos de Godzilla: King of Monsters (2019) y Kong: Skull Island (2017), pertenecientes al MonsterVerse de Legendary Entertainment. Con un elenco encabezado por Alexander Skarsgård, Millie Bobby Brown y Rebecca Hall, esta producción genera una lucha por la supervivencia de la humanidad, donde uno de los dos monstruos triunfaría, mientras que el otro acabaría derrotado.

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Sin embargo, a nadie le preocupa demasiado el drama de los personajes humano, aunque sí es cierto que se extrañó cierta profundidad en esas tramas. De todas formas, las expectativas estaban puestas en el duelo final entre ambos monstruos gigantes. Cada uno con sus propias fortalezas y debilidades.

Cuando ambos monstruos luchan, sentimos que la tensión está a flor de piel. Esto se debe a que hay un enorme trabajo de montaje, tanto de vídeo como de sonido, que hacen que cada golpe y cada herida pueda percibirse. Además, las animaciones en CGI se han pulido hasta el punto en el que parece que los escenarios son absolutamente reales y que la destrucción de la Tierra bien podría suceder en cualquier momento.

Justamente, ese tercer acto de batalla es el que cautiva a los fanáticos. Para Xataka, todas las escenas de acción son extensas desde la duración, pero también incluyen sus sorpresas para darle un ritmo increíble y que dejará tensionados a todos los espectadores.  

Por ejemplo, el cambio de los escenarios reales a uno especial de fantasía, donde se pierde toda credibilidad “real”, no significa un paso atrás, sino todo lo contrario: sirve para que los espectadores se maravillen con las posibilidades que ofrece el género y que aquí terminan alcanzando su clímax. Es decir, aún en sus experimentaciones, esta película logra cautivar a la audiencia por su enorme ritmo narrativo y el fan service bien utilizado.

Algo similar ocurría en las películas de los Avengers, donde, cuando se culminaba con las tramas más importantes, se optaba por dejar a un lado la verosimilitud para ofrecerle a los fanáticos unas peleas y escenas que condensen todo el hype de los fanáticos. Esto mismo lo entendieron en Godzilla vs Kong, pues a veces se juega con la fantasía para darle una cuota más de emoción a los combates.

Es decir, Godzilla vs Kong se preocupa, principalmente, por atender la demanda de los fanáticos, que esperaban un enfrentamiento épico, donde ambas bestias demuestran el máximo potencial de sus poderes. Sin importar el monstruo al que apoyes, te darás cuenta de que el producto final es brillante y formará parte de lo más importante del género de monstruos gigantes.