“House of Gucci”: una gran obra sobre el poder y las diferencias sociales

Está claro que Ridley Scott es uno de los directores más importantes de la historia del cine. A sus 83 años, este cineasta se hizo conocido por algunos filmes, como "Blade Runner", "Gladiador" o "Alien, el octavo pasajero". Por lo tanto, en este 2021 se esperaba con ansias una película que también entusiasmaba por su gran elenco.

Se trata de "House of Gucci", una cinta basada en el libro "The House of Gucci: A Sensational Story of Murder, Madness, Glamour and Greed", escrito por Sara Gray Forden. En la película encontramos actores de la talla de Lady Gaga, Adam Driver, Jared Leto, Al Pacino o Salma Hayek, que interpretan a distintos personajes importantes de esta familia.

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"House of Gucci": una gran historia

La película cuenta la historia de Patrizia Reggiani, interpretada por Lady Gaga, y su relación con Maurizio Gucci, interpretado por Adam Driver. En primera instancia la película cuenta con tintes románticos. No obstante, rápidamente la cinta se vuelve mucho más profunda y oscura, debido a una abrupta separación que conlleva un plan de venganza que hará que las cosas cambien.

En la vida real, Reggiani es conocida como la “viuda negra de Italia” por supuestamente haber asesinado a Maurizio Gucci. Ella siempre ha manifestado su inocencia, pese a haber recibido una condena de 29 años de prisión por ser la autora del crimen.

Este hecho importante es retratado a la perfección en la película, ya que muestra la transición entre lo que debería haber sido una relación de amor hacia una historia de venganza, celos y poder. Ahí es donde "House of Gucci" logra su eficacia, pues demuestra qué tan endeble puede ser el tejido social que genera la búsqueda del dinero.

Gran parte de esta fuerza narrativa se da en las interpretaciones de Lady Gaga y Adam Driver que logran cautivar de inmediato al espectador. Lo mismo sucede con Jared Leto y Al Pacino, que aportan esa cuota de carisma que siempre es bienvenida en una cinta de este tipo.

A esto también hay que sumarle el exquisito trabajo de fotografía y dirección al que nos tiene acostumbrados el director. De una manera elegante, se nos muestra la diferencia entre las clases sociales a partir de una excelente ambientación climática.

Básicamente, la historia abarca un período temporal que oscila entre 1973 y 1995, por lo que el vestuario, los maquillajes e incluso algunas expresiones irán modificándose a través de los años. Así, las personas que amen esta clase de detalles seguramente quedarán fascinadas por todo el trabajo que hay detrás.

Sin dudas, es uno de los filmes imprescindibles de este 2021 y que seguramente será uno de los candidatos para el Óscar del año que viene.