Bienestar

¿Cómo afecta a tu salud la calidad del aire que respiras?

La contaminación del aire es el mayor riesgo ambiental para la salud humana. No obstante, a veces pasa desapercibida, aunque tenga un impacto enorme en la calidad de vida y el desarrollo de enfermedades

Mujer usando un cubrebocas

Foto: Freepik

LatinAmerican Post | María Fernanda Ramírez Ramos

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La inhalación y exhalación son dos acciones que componen la respiración y que se realizan de forma automática. Desde la antigüedad, diversas culturas se han interesado por el proceso de respirar. Por ejemplo, en el yoga, la respiración es uno de los pilares, que permite equilibrar cuerpo y mente. Asimismo, ante momentos de miedo, enojo o estrés se recomienda hacer una pausa y respirar lentamente. Sin embargo, la calidad del aire que se respira puede afectar el bienestar. 

El proceso vital de oxigenar los pulmones influye en múltiples funciones del cuerpo, más allá del sistema respiratorio. Por esta razón, la contaminación del aire pone en peligro la salud y el bienestar. De acuerdo con cifras de las Naciones Unidas, la contaminación del aire provoca cerca 7 millones de muertes prematuras al año. "La convierte en el mayor riesgo ambiental para la salud humana y una de las principales causas evitables de mortalidad y morbilidad a nivel mundial", señala la organización.

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¿Cuáles son las consecuencias de respirar un aire contaminado?

De acuerdo con informes de la OMS los daños por la contaminación del aire en la salud humana han crecido rápidamente y son generados hasta por niveles bajos de algunos contaminantes. Las PM 2.5 son partículas muy pequeñas que se encuentran en el ambiente. Aunque a simple vista no son perceptibles, pueden causar daños. "El material particulado, especialmente PM2.5, es capaz de penetrar profundamente en los pulmones e ingresar al torrente sanguíneo, causando impactos cardiovasculares, cerebrovasculares (derrame cerebral) y respiratorios. Hay evidencia emergente de que las partículas impactan en otros órganos y también causan otras enfermedades", señala la OMS. Las enfermedades más comunes son de tipo respiratorio como el asma. 

Un estudio publicado en la Revista Environmental Health, realizado por investigadores de la Universidad de Málaga, encontró que la contaminación del aire puede tener un impacto en la función tiroidea. Aunque los resultados aún no son concluyentes, encontró que: "Las exposiciones a PM 2.5 en la población general se asociaron con alteraciones leves en la función tiroidea". Por otra parte, puede causar daños en la piel, irritar las muscosas y favorecer el desarrollo de enfermedades autoinmunes o el síndrome metabólico.

Con el fin de generar conciencia sobre la necesidad de actuar por un aire limpio y aumentar los esfuerzos internacionales para mejorar la calidad del aire, desde 2019 la Asamblea General de las Naciones Unidas eligió el 07 de septiembre como el Día Internacional del Aire Limpio por un cielo azul. Además, la ONU señala que también es un tema de importancia ambiental porque la contaminación del aire afecta negativamente a los ecosistemas.  "Muchos contaminantes atmosféricos contribuyen directamente a la crisis climática, por lo tanto, la mejora de la calidad del aire puede mejorar la mitigación del cambio climático", señala.  

¿Cómo actuar para cuidar la calidad del aire? 

Para conseguir un aire libre de contaminación es necesaria la acción en diversos niveles: de la comunidad internacional, de los estados, de las empresas y de las personas. En realidad, la contaminación del aire es prevenible. No obstante, se requiere que los gobiernos se comprometan a transitar de forma más ágil hacia las energías renovables y no contaminantes. Asimismo, es necesario que se implementen mejores sistemas para la medición de la calidad del aire en todo el mundo, y no solo en los países de altos ingresos. 

Por otra parte, las personas pueden ayudar evitando comprar productos que contengan contaminantes atmosféricos, como ciertos aerosoles o aromatizantes artificiales. Asimismo, reducir el consumo de tabaco y optar por electrodomésticos que contengan tecnologías de eficiencia energética contribuye a disminuir la contaminación. Adicionalmente, mantener los carros en buen estado, preferir la compra de coches eléctricos, caminar, usar el transporte público o la bicicleta también aporta. 

Aunque se piense que la contaminación del aire solamente viene por la industria, la realidad es que muchos productos de venta libre que se encuentran en los hogares pueden liberar micropartículas que también contaminan el ambiente. Una investigación realizada por el Royal College of Physicians sobre el impacto de la contaminación del aire, encontró que objetos caseros como las esencias, velas o varitas de incienso son potenciales fuentes de polución. Cuando interactúan con el fuego o el ozono pueden liberar tóxicos. Por esta razón, es necesario informarse sobre los componentes de las fragancias, productos de aseo o cosméticos que se tienen en el hogar. 

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