La despenalización de la marihuana tiene múltiples desafíos para la salud pública

En el debate de la legalización del cannabis hay dos vertientes. Por un lado, la aprobación para uso medicinal y, por el otro, la legalización para uso recreativo. Esta última suele causar mayor controversia en la sociedad. No obstante, cada vez son más las iniciativas de ley en el mundo para que se cambie el enfoque del consumo de drogas, en especial con la marihuana. Colombia es uno de los países de la región de América Latina y El Caribe en el cual se abrió recientemente el debate sobre la regulación del uso de cannabis. Asimismo, no hay que olvidar que la región, con Uruguay, es líder en el tema.

Ante este panorama, la Sociedad Latinoamericana Interdisciplinaria de Cannabinología (SLIC) realizó una serie de recomendaciones para el consumo adulto del cannabis, publicadas por el diario El Espectador. Estas apuntan a que las regulaciones se crean en el marco del respeto a los derechos humanos y con la mayor evidencia científica posible. Asimismo, destacó que es preciso que fortalezca el acceso a la salud pública y que se trabaje en planes de prevención, especialmente con la población joven. No obstante, también hizo énfasis en los peligros que supone la prohibición y las ventajas de la regulación, para tener en cuenta factores como el uso de pesticidas en los cultivos.

No hay que subestimar al cannabis

El Informe Mundial sobre las Drogas del 2022 de la UNODC analizó las tendencias del cannabis después de su legalización en diversos países. En el caso de Norte América, el informe señala que la legalización en diversos lugares de esta región "parece aumentar su consumo diario, especialmente el de productos cannábicos potentes y sobre todo entre las personas adultas jóvenes. También se reportan aumentos relacionados en personas con trastornos psiquiátricos, suicidios y hospitalizaciones". Asimismo, se redujeron las tasas por posesión de marihuana y aumentaron los ingresos fiscales.

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Asimismo, dicho informe señala que en Suramérica y América Central "la mayor proporción de personas en tratamiento por trastornos relacionados con el consumo de drogas se encuentra allí principalmente por trastornos relacionados con el cannabis".

De acuerdo con información de las Naciones Unidas, la potencia del cannabis se multiplicó por cuatro en diversas partes del mundo durante los últimos 20 años. No obstante, "la proporción de adolescentes que percibe dicha droga como perjudicial se redujo hasta en un 40%". Este es un indicador clave para comprender por qué es fundamental hacer pedagogía sobre el consumo de marihuana, desde un enfoque de salud pública. No hay que subestimar sus efectos y es preciso tener educación para que las y los consumidores reconozcan sus riesgos y beneficios.

Peligros del consumo de marihuana 

Aunque el consumo de cannabis recreativo o marihuana se vuelva legal en diversos países, esto no quiere decir que no tenga riesgos para la salud. El alcohol, el tabaco y el azúcar (consumida también por niños) son productos legales en la mayoría de países. Sin embargo, tienen efectos nocivos para la salud. Un caso que llamó la atención en los últimos años es el de los cigarrillos electrónicos, pues socialmente no se están percibiendo sus riesgos para la salud. De esta forma, personas muy jóvenes lo consumen sin muchos controles, lo que ya empezó a alarmar a las autoridades sanitarias. Algo así podría suceder con el cannabis, pues aunque pueda ser usado de forma recreativa, en un entorno responsable, es preciso concientizar sobre los riesgos en su consumo excesivo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) evaluó los efectos nocivos del consumo de marihuana. Aunque puede tener usos medicinales legítimos, también se identificaron efectos adversos significativos. Entre ellos se encuentran problemas respiratorios, impactos en la salud mental, dificultades cognitivas, riesgo de adicción y efectos en la conducción. Estos efectos pueden variar según la cantidad y frecuencia de consumo, la edad de inicio y las características individuales. Es importante buscar la orientación de profesionales de la salud para obtener información específica y comprender las posibles consecuencias del consumo de marihuana, en especial si ya se lleva un consumo cotidiano o se percibe que afecta las actividades diarias.

Por esta razón, los retos para los sistemas de salud son amplios, pues deben estar preparados para fortalecer la prevención y hacer pedagogía sobre el consumo de cannabis.