5 países que están combatiendo legalmente las fake news
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Luego de la victoria de Trump en las pasadas elecciones norteamericanas, las fake news tomaron la atención de los gobiernos asustados por la divulgación de la información falsa
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Este año está cargado de elecciones generales: Argentina, Guatemala, India y Bolivia son algunos de los países que este año decidirán si siguen con el mismo presidente o si cambian de nombre. Para asegurar su puesto en el cargo más importante de sus respectivas naciones, los candidatos harán lo que sea para hundir a sus rivales y salir victoriosos. Claro, algunos se apegan a su moral para no incurrir en juegos sucios, pero la mayoría de políticos no le importa pasar por encima de sus rivales con mentiras, trabas, espionajes e intimidaciones.
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En los últimos años, más específicamente con las últimas elecciones presidenciales estadounidenses, el mundo conoció y se apropió del término fake news. Esto no quiere decir que antes del 2016 todas las noticias alrededor del mundo fueran verdaderas, sino que con la carrera presidencial de Donald Trump y las miles fake news que lo hacían ver un santo al lado de su rival de ese entonces Clinton, el mundo se dio cuenta del verdadero impacto de estas falsedades. De hecho, tres miembros de la Universidad Estatal de Ohio publicaron un estudio al respecto y sus conclusiones sugieren que sin las fake news, lo más probable es que Clinton sería hoy en día la presidente.
Luego de este episodio, varios países prendieron las alarmas y empezaron a tomar acciones para combatir la peligrosa epidemia de falsas noticias para beneficiar a un candidato, una multinacional o una figura pública. A continuación les presentamos cinco países que han tomado cartas en el asunto para suprimir las fake news.
1. Francia
El año pasado, el presidente Macron logró aprobar una ley para suprimirlas en tiempos de elecciones. No fue fácil, pues el senado la rechazó dos veces, según informa Euronews. Sin embargo, muchos franceses no ven con buenos ojos esta ley, pues argumentan que, si no hay un control riguroso, la censura será masiva. Incluso le dieron facultades a la autoridad televisiva francesa de bajar del aire canales extranjeros bajo sospecha de esparcir mentiras durante las elecciones.
2) China
Siendo el país asiático uno de los más severos en cuanto a la ley y el orden, hace tres años China aprobó una ley para combatir las noticias falsas, más que todo relacionadas con el orden social y económico. Un año depués, en el 2017, sacó otra ley que obliga a las redes sociales a solo permitir que sus usuarios compartan noticias de medios de comunicación aprobados por el gobierno. El año pasado, el gobierno lanzó una app que permite a los ciudadanos reportar noticias potencialmente falsas para que los especialistas las revisen y dicten una sentencia.
3) Alemania
EN el 2017, el país bávaro impulsó una ley para regular contenidos perjudiciales en la internet, como discursos de odio, pornografía infantil y fake news. Si bien los alemanes no tienen una ley específicamente para combatir información falsa, el gobierno es bastante firme con las fake news. Sin embargo, no han cesado de llegar quejas de ciudadanos alemanes que alegan que les censuran publicaciones claramente satíricas, según FT.
4) Kenya
El presidente Uhuru Kenyatta firmó una ley en mayo del año pasado para combatir el cibermatoneo y la difusión de información falsa. Aquel que incurra en estos delitos se enfrentaría a dos años de cárcel o una multa de 50,000 dólares. Sin embargo, salieron muchos críticos, en su gran mayoría periodistas, que argumentaron que las autoridades podrían censurar cualquier medio que sacara una noticia perjudicial para ellos. No duró ni un mes la ley, pues en mayo la Corte Suprema la suspendió indefinidamente.
5) Arabia Saudita
Si bien el país árabe no tiene una ley específica en contra de las fake news, el episodio ocurrido con la muerte del periodista del Washington Post, Jamal Khashoggi, prendió las alarmas del reino, luego de que se conociera mundialmente sobre la muerte del periodista en el consulado saudí en Estanbul. Hasta el día de hoy no se sabe quién exactamente lo mató, pues su cuerpo no aparece y no hay videos del periodista saliendo del consulado.
En medio de todo este episodio, un montón de fake news inundaron las redes sociales, en especial Twitter, con varias conclusiones sin fundamento. La mayoría de estas paparruchas señalaban al reino saudí como el responsable del asesinato, incluso reportaron que un príncipe fue removido de su cargo por el episodio. La respuesta inmediata de Arabia Saudita fue amenazar a aquellos que divulgarane ste tipo de información falsa con cinco años de prisión y una multa de hasta 800,000 dólares.
LatinAmerican Post | Pedro Vergara
Copy edited by Vanesa López Romero
