Con el anuncio de avalo del partido político de las FARC, la contienda electoral por la presidencia sugiere alquilar balcón puesto que vienen 8 meses intensos

El pasado 31 de octubre, el Consejo Nacional Electoral (CNE) reconoció a la personería jurídica a la Fuerza Alternativa Revolucionara del Común, el partido político de las FARC. Con esta decisión, se le otorgó vía libre para participar en la política a los excombatientes de este grupo armado; se debe tener presente que estos rebeldes firmaron un acuerdo de paz con el gobierno del presidente Juan Manuel Santos.

Con la decisión del CNE, se da reconocimiento pleno a la documentación sobre los estatutos, la plataforma ideológica, el código de ética del partido político, pero más sobresaliente aun es la aceptación del certificado de entrega de armas, requisito indispensable para que se formara esta alianza política. Ahora las FARC podrán participar en las elecciones legislativas de 2018 así como también en las presidenciales; sin embargo, antes de poder asegurar que estarán en la contienda electoral, deberán pasar por la Justicia Especial para la Paz (JEP).

Luego del anuncio de la CNE, la dirigencia de las FARC en rueda de prensa dio a conocer los principales nombres que serán parte de las listas al Congreso de la República y a la presidencia, dando como candidatos a Iván Márquez para el Senado, Jesús Santrich para la Cámara de Representantes y Rodrigo Londoño alias” Timochenko” para presidente.

La noticia genero reacciones a favor y en contra. El senador del Polo Democrático Iván Cepeda aseguró, a través de esta decisión, la apertura de un nuevo capítulo de la historia de Colombia y, así mismo, ratificó la disposición para la implementación de los acuerdos de La Habana. “Además de ser parte del cumplimiento del acuerdo de paz, es un hecho que debemos celebrar. Es ni más ni menos que protocolizar el ingreso de las FARC a la política y el abandono definitivo de la vía armada y la violencia como forma de ejercer sus convicciones”, declaró Cepeda.

Por su parte, el senador Alfredo Rangel del centro democrático, enfatizó que la decisión atenta contra la dignidad de las víctimas del conflicto. “Quienes hayan sido responsables de crímenes de lesa humanidad y de guerrea deberían pagar penas de cárcel y no tener derecho a estar en cargos públicos de elección popular. Tanto Iván Márquez como Timochenko y Catatumbo tienen sentencias en firme de la Justicia Colombiana (…) Esto es una ofensa a las víctimas y una violación contra la constitución y la ley colombiana”, aseguró al ser preguntado sobre su opinión acerca del anuncio de la CNE.

Ya solo quedan ocho meses para las elecciones presidenciales y la carrera para la presidencia se acaba de poner más interesante debido a el anuncio de la CNE y el partido FARC. Actualmente, hay más de 25 personas interesadas en convertirse en candidatos a la presidencia. En esta contienda sorprende el número de personas políticas que aspiran llegar a las urnas por medio de recolección de votos.

Entre los principales contendientes a la cita electoral presidencial ya se perfilan; German Vargas Lleras se ha consolidado en las recientes semanas como el posible favorito a ganar la presidencia. Sin embargo, sus actuaciones privadas y en actos públicos han sido motivo por el cual las críticas hacia su campaña no han dado espera.

Por su parte, Sergio Fajardo aspira a demostrar que el 2018 es un año en el que los partidos caerán debido a la mala imagen que los enfrasca; el político piensa que como independiente es su oportunidad de demostrar qué pensar fuera de la caja es una opción válida y puede ser conveniente para el futuro del país.

Humberto de la Calle, quien por un momento fue tildado como el candidato de las FARC por haber sido jefe negociador del Gobierno en las negociaciones de La Habana, defiende hoy que las FARC no van a llegar a la presidencia, sabiendo que, en el plebiscito para la paz, el voto en contra de los acuerdos salió vencedor.

Gustavo Petro volverá a presentarse bajo la bendición de los indignados; su mayor argumento para afrontar las urnas son los resultados de su administración cuando fue alcalde mayor de Bogotá. Su fuerte son las ciudades de la costa atlántica y Bogotá.

Juan Fernando Cristo parece ser la carta de los liberales, aunque no es seguro hasta la consulta que hará el partido el próximo 19 de noviembre. Su forma de pensar no está distante de Humberto de la Calle, pero le favorece el salir respaldado por un partido.

Marta Lucía Ramírez vuelve a luchar por ganarse su lugar en la contienda electoral. Ramírez sabe muy bien que la cercanía entre conservadores y Centro Democrático le pone las cosas difíciles, pero de ganar en una primera vuelta, la segunda vuelta sería fácilmente ganable por la alianza interpartidista.

Viviane Morales y Juan Carlos Pinzón parecen ser los candidatos que hasta el momento también podrían disputarse fuertemente la lucha por la presidencia, incluso en una segunda vuelta. Pero también hay que resaltar la falta de apoyo que han tenido a tan solo meses de las elecciones.

No podríamos dejar de lado también las candidaturas de Alejandro Ordoñez, Claudia López, Jairo Clopatofsky y Clara López, quienes, aunque, a excepción del ex procurador Ordoñez, no han lanzado oficialmente el disparo para la carrera. Ordoñez se presenta con un discurso conservador que cautiva a un segmento de la población, pero los ocho meses que faltan serán intensos y revelarán alianzas para conseguir con certeza el lugar en la Casa de Nariño.

Latin American Post | Carlos Eduardo Gómez Avella

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