¿Qué ha dejado el proceso de paz con las Farc?
Han pasado dos años desde la firma del proceso de paz, ¿Cuáles son los aspectos positivos y negativos de este? Conozca algunos de ellos
Desde que se firmó el proceso de paz entre el Gobierno del entonces presidente Santos y las Farc, el balance del posacuerdo navega sobre aspectos negativos y positivos. Veamos algunos de ellos:
Read in english: Positive or Negative? This is what the peace process with the FARC has left us
Lo positivo
Disminución de muertos en el Hospital militar
La directora del Hospital Militar, Clara Galvis y en entrevista con Caracol Radio, afirmó que los soldados heridos por la guerra en 2011 era de un promedio de 500. La causa principal tenía que ver con los ejercicios militares que se hacían contra el grupo armado más grande de Colombia: las Farc.
Otra tragedia que enfrentaba el Hospital Militar eran los miembros de la fuerza pública que perdían sus extremidades. La cifra llegó a 120, todo esto antes de la firma de los acuerdos de paz en el 2016. Sin embargo, el panorama que vive el Hospital militar tras el acuerdo de paz firmado con las Farc es positivo. Hasta finales del 2017, solo se presentaron 35 heridos y para 2018, 8 uniformados fueron amputados, afirma Galvis.
Por el momento, si el actual presidente de Colombia decide mejorar la implementación del proceso de paz con las Farc para mantenerlo vivo, el Hospital Militar seguirá dedicando sus esfuerzos a atender a los militares que son heridos por combates con otros grupos.
"Hacemos la rehabilitación con prótesis, hacemos la rehabilitación en salud mental, tratamiento de enfermedades tropicales y obviamente tenemos una población adulta mayor que son nuestro veteranos y sus familias y hacemos manejo de enfermedades crónicas y de alto costo", fueron las palabras de Galvis a la medio citado.
Algunos excombatientes se insertaron a la vida civil
Con el temor de un desplome del acuerdo de paz, producto de la posible extradición de Santrich que realice el Gobierno de Iván Duque, algunos excombatientes se han reintegrado a la vida civil.
Es el caso de 10 excombatientes que se dedican a hacer muñecas de trapo y a cultivar alimentos (como plátano, yuca y maíz) para obtener ingresos. Atrás quedaron los cultivos de coca. Su labor la realizan en dos Espacios Territoriales de Reincorporación y Capacitación (ETCR) en el departamento del Cauca, que designó el Gobierno Santos, como lo reporta Colombia 2020 del medio El Espectador.
Por su parte, la ONU en su sitio web de noticias, destaca la labor de Marcos Martínez, ex guerrillero de las Farc, quien “ahora es el administrador de la Granja Integral Nueva Colombia donde se han cambiado las armas por las rejas de arado”. Su labor, que consiste en cultivar maíz, plátano, fríjol, yuca, tomate y ají, la hace junto a otros 40 excombatientes más en el Conejo, un corregimiento del departamento de la Guajira.
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Lo Negativo
Las zonas abandonadas por las Farc
De acuerdo con un reportaje de la agencia Reuters titulado “Una paz quebrantada”, los espacios que dejaron las Farc, tras firmarse el proceso de paz, fueron ocupados por bandas criminales -Urabeños, Rastrojos, Clan Úsuga- y eternos rivales del pasado como el ELN. Pero, sobre todo, el objetivo principal más allá de ocupar el territorio era apoderarse del jugoso negocio que tenían las extintas Farc: narcotráfico, extorsión y minería ilegal.
Por ejemplo, los pobladores de Tumaco, una de las zonas más pobres de Colombia, según Reuters, esperaban que todo cambiara al firmarse la paz, pero la realidad es que la lucha entre las bandas criminales por controlar este territorio que tiene salida al mar Pacífico es algo constante. Es una ruta de oro para transportar cocaína. En medio de esa confrontación la población civil es la que más ha sufrido a pesar de haberse firmado la paz con las Farc.
Asesinato de líderes sociales
Según el Sistema de Información sobre Agresiones contra Defensores y Defensoras de Derechos Humanos (SIADDHH), durante el gobierno de Juan Manuel Santos, a pesar del proceso de paz, hubo 532 líderes sociales asesinados. Los asesinatos son sistemáticos y tienen que ver, dentro del contexto de implementación del proceso de paz, con el punto de la restitución de tierras. El líder social que lucha por defender a quienes reclaman su tierra, se ha convertido en objetivo militar de bandas criminales y grupos armados.
A dicha situación, se suma que los líderes sociales que también han sido asesinados, fueron aquellos que manifestaron la pronta implementación de lo acordado en La Habana. Además de ellos, están los que denuncian la débil sustitución de cultivos ilícitos, que también forma parte del acuerdo de paz. Esto con base en el reportaje, para LatinAmerican Post, 3 fallas del Estado colombiano en la protección de líderes sociales.
LatinAmerican Post | Edwin Guerrero Nova
Copy edited by Laura Viviana Guevara Muñoz
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