7 grandes éxitos para recordar a Darío Gómez, el rey del despecho

Nadie es eterno en el mundo, y eso lo sabía perfectamente Darío Gómez. Con más de cuatro décadas en la industria musical, cantándole al amor y al desamor, el rey del despecho dejó un legado importante en la música popular. Se convirtió en un invitado de lujo en las reuniones familiares de muchos hogares colombianos, llegando a vender más de cinco millones de discos a nivel mundial.

El nacido en San Jerónimo, en el departamento de Antioquia, debió ser ingresado de emergencia en la Clínica Las Américas Auna, el pasado 26 de julio, tras sufrir un colapso súbito en su casa. Sin embargo, al llegar sin signos vitales, y luego de realizarle maniobras de resucitación cardio pulmonar, el artista fue declarado muerto a las 7:31 pm, según informó el centro médico en un comunicado.

Darío Gómez comenzó a componer a sus 16 años, inspirado en el amor y el campo. Pero si bien con el tiempo se fue perfilando hacia la parranda paisa y la música tropical, el destino y sus vivencias lo convirtieron en el rey del despecho, un apodo que llevó con orgullo desde 1992. Y es que gracias a su talento e increíble voz, la mayoría de sus canciones se transformaron en éxitos que lo consolidaron en un género de culto en Colombia.

"Es para la música popular lo que Diomedes Díaz es para el vallenato, un verdadero ídolo de las multitudes", expresó en un comunicado Discos Fuentes, una disquera que tuvo el honor de grabar algunos de sus temas. Ese sentimiento, sin dudas, nos da una pequeña idea de la idolatría que le tienen y el porqué su figura quedará inmortalizada. Como un sentido homenaje, acá dejamos 7 de sus canciones más icónicas.

"Nadie es eterno en el mundo"

Posiblemente, el mayor éxito de su carrera musical, al punto de convertirse en la mayor inspiración de una novela de 2007 titulada con su mismo nombre. La historia de su composición parte de una conversación entre Gómez y un amigo de su pueblo de origen, reflexionando sobre lo frágil que es la vida y el olvido hacia las personas fallecidas.

"Sobreviviré"

Esta canción, tan particular, es otra de las más recordadas de su repertorio. Tiene su origen del clásico "I Will Survive" de Gloria Gaynor. En cierta manera reescribió la letra y le colocó la típica melodía de despecho. Cabe mencionar que la historia con su esposa Olga Lucía Arcila sirvió de inspiración, ya que vivieron momentos difíciles desde que se conocieron en la adolescencia.

"Daniela"

El trasfondo de este tema es bastante impactante y doloroso. No fue sino tiempo después de su publicación que Gómez confesó cuál era la historia detrás de su letra y triste melodía, pues se trataba de una tragedia que había golpeado a su familia. Luz Dary Gómez, una de sus seis hijos, falleció al recibir un impacto de bala, dejando huérfana a Daniela, nieta del compositor.

"Ángel perdido"

Si hay un tema que haya marcado un antes y después en la carrera del rey del despecho, es, sin lugar a dudas, esta. Era la década del setenta y Gómez comenzaba a consolidarse como artista cuando su hermana Rosángela perdía la vida. Este sencillo, además de ser un homenaje hacia ella, mostró su versatilidad para convertir tragedias personales en canciones, siendo la primera en vender más de medio millón de copias.

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"Esta Navidad no es mía"

La época decembrina suele ser de alegría y reuniones en familia, pero lamentablemente no para todos. El despecho también se hace presente por estas fechas gracias a un himno que hizo Gómez luego de un triste 24 de diciembre de 1988. Su esposa Olga llegó a casa en medio de lágrimas después de visitar a su hermano en la cárcel, una desgracia que no los dejó celebrar y que él usó para escribir este éxito.

"La tirana"

De todas las letras de despecho y traición, probablemente esta sea con la que más personas se hayan identificado. Las relaciones amorosas fallidas eran las situaciones que más inspiraban a Gómez, transformando esas vivencias en canciones que a día de hoy no paran de sonar en bares y cantinas. Era el sentir de millones de personas a través de su voz.

"Mi renuncia"

Corría el año 2006 cuando Gómez celebraba sus 30 años de vida artística con un álbum que mantenía intacta su esencia. Con "Mi renuncia" se engloba todo el sentir de las 15 canciones, demostrando así que su particular sonido y profundas letras no hacían más que seguir agigantando su figura en Colombia -y gran parte de Latinoamérica- como el único e inigualable rey del despecho.