Reseña de “Elvis”: otra frenética biopic

Elvis Presley es un nombre difícil de ignorar, es casi imposible que alguien en la tierra no lo conozca. La mayor parte de los detalles de su vida son conocidos o se especulan muchas cosas sobre ellos, por ello ha sido una apuesta riesgosa la de llevar a la pantalla grande la vida del “Rey del rock”. El director australiano Baz Luhrmann se apoya en su experiencia en cintas sobre temas musicales presentando "Elvis" que llega a las salas de cine de Latinoamérica.

"Elvis" de Baz Luhrmann

"Elvis" es un recorrido por la vida del “Rey del rock” desde sus orígenes hasta su muerte. Este filme retrata su infancia en la pobreza en una comunidad afroamericana, su descubrimiento, la crucial relación con su representante, la llegada a la cima de la fama y el costo que esta tuvo en su vida. Pero en Elvis no vemos solo el crecimiento profesional del artista, sino también su impacto en la cultura estadounidense, la censura y su forma de confrontarla para profundizar su huella entre la juventud que lo impulsó a la inmortalidad eternizando su legado.

La cinta es protagonizada por Austin Butler ("Once Upon a Time in Hollywood", "Dune") como Elvis Presley; Tom Hanks ("Forrest Gump", "The Green Mile") como Tom Parker, y Olivia DeJonge ("The Visit", "The Society") como Priscilla Presley, en los papeles principales. La dirección corrió a cargo de Baz Luhmann quien es conocido por trabajos como "Moulin Rouge" (2001) y "Romeo + Julieta" (1996), entre otros. 

Una biografía impersonal de Elvis Presley

Pese a que la película retrata la vida de Presley, no lo hace desde su punto de vista, sino del de Tom Parker, su representante durante prácticamente toda su carrera artística. El argumento principal de la cinta es sobre la relación de Parker con Presley, la cual se caracterizó por la explotación del representante sobre el artista. No obstante, al ser narrada desde la perspectiva de Parker, el personaje justifica, con razón o no, sus acciones sobre la carrera y vida de la celebridad. 

Siendo su representante desde la juventud, pareciera que la vida de Elvis Presley se explica por la presencia de Tom Parker, ya sea de forma pública o en la sombra. La película retrata la manipulación de Parker sobre Presley para obtener lo que quiere de él. Aunque, cabe resaltar, que también la película muestra el impacto del representante sobre la carrera de Elvis al maximizar el uso de su imagen, la mercadotecnia y los recursos mediáticos disponibles en su época, entre ellos el de la televisión. Tanto Presley como Parker fueron pioneros en sus respectivas áreas: Elvis como símbolo sexual y artista de su género, mientras que Parker como la mente detrás de uno de los mayores artistas del siglo XX.

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El frenético sello de Luhrmann

Elvis tiene una duración de 2 horas 30 minutos, lo que la convierte en una cinta larga. El recorrido por la vida de Elvis inicia en su niñez y culmina con su fallecimiento, más de tres décadas condensadas. Sin embargo, el ritmo frenético que caracteriza a los filmes de Luhrmann permiten que la cinta no caiga en la lentitud, la edición recuerda a "Romeo + Julieta" (1996) o a
"The Great Gatsby" (2013). En ese sentido, la película cumple notablemente.

Este estilo permite también entrar en el éxtasis que pone en pantalla durante los conciertos de Elvis, frente a multitudes de mujeres gritando su nombre y un artista dando todo de sí. En este sentido, el filme es espectacular. La agitación y la velocidad de la edición dan como resultado el mostrar a un Elvis que vive acelerado, por el influjo de las drogas o por la carga de trabajo, que al final terminarían con su vida. 

Aciertos y desaciertos de Elvis

"Elvis" tiene muchos aciertos que hacen de ella una experiencia a veces psicodélica, el estilo y lenguaje que caracterizan a Luhrmann funcionan en la intensidad de la vida de Presley que pretende mostrar. El cuidado en la producción también sorprende, tanto en el vestuario y escenarios de la época, como en la caracterización de Butler y Hanks en sus respectivos papeles. Butler logra meterse en el papel de Elvis sin caer en el extremo de ser uno más de los miles de imitadores que existen de él, por su parte Hanks representa a Tom Parker logrando convencer como un embaucador y un hábil miembro de la industria de la música estadounidense.

Como desaciertos, la película cae en lugares comunes de las cintas biográficas, un recorrido cronológico que no profundiza bien por el ritmo veloz de la cinta. De igual manera, tiene el problema de no hacer una crítica o reflexión real sobre el artista, pone en pantalla los momentos “famosos” de Elvis, pero sin interiorizar realmente en la persona. Intenta mostrar un Elvis en soledad, alejado emocionalmente de quienes lo rodean, sin capacidad de decidir y fácilmente manipulado por su representante. Muy poco se ve del Elvis rebelde al que estamos acostumbrados, muy pocos destellos de ello se notan en el filme, lo que hace que a ratos parezca sombrío y falto de carácter. Y es ahí donde no queda claro si es el mero punto de vista de Tom Parker, quien pretende erigirse como el salvador y el autor de Elvis como celebridad, o si es el punto de vista del director.