La Isla de Pascua: ínsula de misterios
En sus próximas vacaciones explore otra cultura y aléjese de la globalización
“Rapa Nui” o la Isla de Pascua es una ínsula ubicada en la polinesia, al oeste de Chile en el Océano Pacífico. Es uno de los lugares poblados más aislados del mundo. Pertenece a la soberanía de Chile y se ubica a más de 3.700 kilómetros de Santiago, la capital. Se puede llegar a ella desde Chile continental en avión en un viaje de 4 horas.
Declarada Patrimonio de la Humanidad en 1995, Rapa Nui que significa “Isla Grande” es una isla maravillosa, misteriosa y llena de sorpresas. Sus habitantes se destacan por su alegría, amabilidad y por la riqueza de su cultura. Antiguamente se la llamaba “Te pito o te henua” que quiere decir «El ombligo de la Tierra» y también “Mata ki te rangi” cuya traducción sería «Ojos que miran al cielo». La denominación de Rapa Nui se hizo posteriormente para denominar tanto a los habitantes como a su lengua.
La Isla de Pascua es famosa por los Moai, que son estatuas de gran tamaño, pesan hasta 10 toneladas, hechas con piedra volcánica y datan de alrededor hace 1500 años. En un principio se creía que únicamente eran cabezas, pero con el paso del tiempo y excursiones arqueológicas, se descubrió que poseían cuerpos completos. Miden hasta 8 metros de alto. Llevan mucho tiempo enterradas y poseen inscripciones que podrían datar de hasta 15.000 años de antigüedad.
Hay un viejo lema pascuense que dice la isla es un lugar “donde poder perderse si no se quiere ser encontrado”. La isla está rodeada de volcanes y su cultura no deja de ser un misterio, en su mayoría por la historia de esconden las magníficas estatuas de piedra volcánica.
La isla no tiene más de 6 mil habitantes y la mayoría vive en Hanga Roa. Los lugareños hablan su propio idioma, además del español. Son amables con los turistas y se esmeran por promover el cuidado de su tierra, pues siempre buscan que las visitas sean responsables con el medio ambiente. En la isla hay más de 600 Moai, 7 de ellos “Ahu Akvi” que miran hacia el mar. También hay museos, sitios ceremoniales o “ahu” y petroglifos. Se hacen además actividades de turismo aventura, se realizan excursiones submarinas en donde se puede apreciar una maravillosa vida submarina, con coloridas especies marinas. También hay un Moai sumergido a 24 metros de profundidad esculpido en cemento por el artista local Beto “Tonka” Riroco. En la Isla de Pascua también se pueden visitar innumerables cuevas que fueron utilizadas años anteriores como viviendas, refugios y lugares donde se realizaban rituales. En ellas se pueden ver pinturas rupestres.
El festival de “Tapati” se celebra en las primeras y es el más importante de Rapa Nui, en el cual hay bailes típicos como el sau sau, juegos tradicionales, confección de embarcaciones tradicionales, cuerpos pintados, triatrlón y culminan con la coronación de una reina. Recomendamos visitar la isla en esa época para poder apreciar al máximo las expresiones culturales de este pueblo asilado de la globalización.
Conocer Isla de Pascua de seguro traerá a los viajeros mucha tranquilidad, asombro por los grandiosos Moai, impresión con su naturaleza e historia y sobre todo seguramente se contagiarán de la alegría característica de los habitantes isleños.
Latin American Post | Daniella Páez Otey
Copy edited by Susana Cicchetto