DEPORTES

A pesar de una malformación, este colombiano es un futbolista profesional

Este colombiano tiene una malformación en uno de sus brazos. Sin embargo, eso no le impidió ser deportista 

A pesar de una malformación, este colombiano es un futbolista profesional

Tanto en la vida como en el deporte hay momentos para detenerse, admirar y aplaudir ejemplos de superación. Uno de esos casos es el de Santiago Arroyave, un joven de 18 años nacido en Medellín. A pesar de sufrir focomelia, una enfermedad que impidió el crecimiento de uno de sus brazos y la malformación de otro, este deportista colombiano logró convertirse en un futbolista profesional.

Read in english: Despite a malformation, this Colombian is a professional soccer player

El momento de gloria de Santiago llegó en un partido entre el Itagüí Leones y el Deportivo Pereira por la Copa Colombia. Faltando cinco minutos para concluir el compromiso, el técnico de su equipo lo llamó para formar parte de los hombres en cancha. En este momento su discapacidad pasó a un segundo plano, por lo que se posicionó en la Primera División del balompié de su país.

“Este sueño lo llevaba persiguiendo desde los seis años. El debut fue muy soñado y gracias a Dios me dieron la oportunidad. A sinceridad, mi corazón parecía detenerse y la sangre corría a mucha velocidad, sentía que tanta felicidad no podía ser real", explicó Arroyave a El Tiempo.

Santiago Arroyave: "Los sueños sí son posibles"

Para entender el boom que generó el debut como futbolista del volante 10, el jugador dijo en la misma entrevista que todo ha dado un giro total, comenzando con la atención que ha recibido por parte de los medios de comunicación. También la fanaticada de muchos países ha manifestado su apoyo por el deportista, sobre todo por su cuenta de Instagram, que actualmente cuenta con más de 100 mil seguidores. Incluso personalidades como Carlos Tévez y Sebastián Pérez, le envían videos con palabras de aliento.

Te puede interesar:  Entrevista exclusiva con Eligio Vento: Una mirada a la vida de un deportista paralímpico

"No se siente uno una persona famosa, pero ahora sí se siente un futbolista de verdad, y eso es muy importante, además por supuesto que contar con muchos seguidores me abre la posibilidad a contar mi historia y que muchas personas que se sienten limitadas se fijen en mi caso y surjan”, contó Arroyave al mismo medio.

Según Goal, el mismo Arroyave declaró que todo lo que ha conseguido se lo debe a Dios y a su familia, pues sin ellos nada hubiera sido posible. Así, ahora es cuando va a seguir luchando por consolidarse como futbolista profesional.

“Nunca pensé que se me fuera a hacer realidad tan rápido este sueño, pero me lo he luchado, he entrenado muy duro, con mucho sacrificio. Y estos son los frutos, que además me sirve para decirles a todos los que me leen, que los sueños sí son posibles. Nunca se rindan, si les salen mal no se desesperen. Dios tiene un plan perfecto para cada uno. Las limitaciones son mentales y con ganas y actitud todo es posible”, confesó.

Otro caso de superación

El caso del Arroyave no es el único de superación deportiva que ha trascendido a nivel internacional. Quizá el caso más memorable del fútbol es el del uruguayo Héctor Castro, un nombre quizá poco recordado en la disciplina. En el Mundial de Fútbol Uruguay 1930, el primero de la historia, el mundo vio como aquel joven de un brazo se transformó en la gran figura de todo un país. Según Azteca Deportes, Castro accidentalmente se cortó el brazo derecho con una sierra cuando apenas tenía 13 años de edad. No obstante, esto no detuvo su carrera en el fútbol.

“Su talento lo llevó a disputar el Mundial con la selección anfitriona y convertirse en leyenda, no sólo por marcar el primer gol para un uruguayo en esta justa, sino anotando también en la final, para transformarse de esta forma en la figura del torneo y, con un solo brazo, levantar la adorada Copa Jules Rimet, un hito que, por qué no, pudiese llegar a emular Santiago Arroyave con la actual copa del mundo". 

LatinAmerican Post | Freddy González

Copy edited by Diana Rojas

Related Articles

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Botón volver arriba