Algas marinas: sabor del mar para la mesa y el medio ambiente

Se puede decir que actualmente la humanidad está sintiendo con más fuerza la crisis ambiental que los expertos venían advirtiendo décadas atrás. Así mismo, desde los gobiernos no se ha hecho mucho por mejorar las condiciones del planeta o al menos, mitigar el daño ya causado. Por eso, el impacto que se avecina es complejo, pues afectará directamente la seguridad alimenticia de millones de personas. 

Ante este escenario de dificultades, no todo está perdido. De hecho, existen alternativas para que la humanidad no tenga que pasar hambrunas. Por ejemplo, las algas marinas prometen ser una solución al problema de la escasez de alimentos y al mismo tiempo, puede aportar significativamente a la reducción de los gases de efecto invernadero. 

¿Por qué las algas marinas pueden resolver la crisis alimentaria mundial?

Algo importante de las algas marinas es que su reproducción solo requiere sol y agua salada. De acuerdo con el portal de noticias de las Naciones Unidas, si se cultivara de manera sostenible al menos el 2% de los océanos, sería suficiente para alimentar a todas las personas del planeta, ya que son ricas en proteínas, vitaminas, zinc y hierro. También hay que destacar que son bajas en grasas y carbohidratos. 

En Asia, desde hace algunos años el consumo de algas marinas se ha vuelto popular, sobre todo en Japón, donde algunas variedades son utilizadas en el sushi. De modo que, los japoneses ya la consumen tres veces al día.

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Por otro lado, en Corea y China también las usan en muchos de sus platos. Esto es esencial porque entre más común sea este alimento, habrá más oportunidades cambiar las dinámicas alimenticias del ser humano y evitar el pronóstico que se ha hecho para el año 2050. 

Entre otras cosas, para el sector cárnico, sería ventajoso que se le suministre al ganado alimentos a base de algas marinas en vez de soja, pues gracias a sus beneficios digestivos podría reducir hasta un 90% las emisiones de metano que producen estos animales. Además, mejora su sistema inmunológico y así evita el uso de antibióticos para el mismo. 

Otros beneficios de las algas marinas para el medio ambiente

Las algas marinas no representarán solamente un beneficio para la alimentación en el futuro. También resultan ser muy útiles para la vida cotidiana y el sector productivo:

• El cultivo de algas marinas puede atrapar los gases que se encuentran presentes en la atmósfera

• Se pueden utilizar como fertilizante natural en el campo

• Sería un reemplazo sostenible para los plásticos

• Pueden ser componentes para medicinas y cosméticos

• Ayudan a limpiar los nitratos y fosfatos que contaminan los océanos

Esta potencial alternativa es una noticia alentadora para la humanidad que durante años ha tenido que lidiar con la idea de un futuro devastador. No obstante, las políticas de implementación deben ser eficaces y que promuevan los objetivos sociales frente al cambio climático, según las Naciones Unidas. 

Una oportunidad alimentaria para América Latina

En la antigüedad, las algas marinas hacían parte de la dieta cotidiana de los pueblos latinoamericanos. Hoy este escenario vuelve a renacer, creando un espacio en una región con dificultades sociales y de nutrición.

Según cifras de la FAO, en América Latina existen más de treinta y cuatro millones de personas que padecen hambre, especialmente en países como Argentina, Brasil, Colombia, Cuba, Ecuador, México, Perú y Venezuela. Por eso, explorar y cultivar algas marinas podría ser un factor elemental para resolver este problema. 

Finalmente, la implementación de estos procesos de cultivos en el mar fortalecerá el sector pesquero, generando fuentes de empleo, pues en los próximos años será prácticamente una necesidad producir algas marinas a gran escala para abastecer la alimentación mundial.