Desde que el astro luso dejó el Real Madrid, los dos delanteros han sido decisivos en las primeras de cambio de la temporada para el conjunto merengue

Cuando un jugador que ha marcado 450 goles en 438 partidos decide irse, ese vacío parece imposible de llenar, y en el caso de Cristiano Ronaldo, se empieza a hablar de una etapa “PostCristiano” en la que el Real Madrid atravesará un periodo de transición con más pena que gloria hasta fichar a un referente similar.

Read in english: After Cristiano Ronaldo: Karim Benzema and Gareth Bale take over

Gran parte de la prensa española –e internacional- no tardó en augurar un negro futuro al conjunto merengue. Especialmente porque, al igual que la temporada pasada, el Real no fichó a jugadores de renombre, exceptuando al portero Thibaut Courtois y a la joven promesa Vinicius Junior.

Ante esta política de austeridad por parte del presidente, Florentino Pérez, todas las miradas recaían en dos hombres: Karim Benzemá y Gareth Bale. El primero viene de completar su peor temporada desde que llegó al Real Madrid, en 2009, con duras críticas desde la grada y muchas voces pidiendo una salida para el delantero francés.

El segundo, asediado por la lesiones, resultó ser decisivo en el tramo final del pasado curso, ganando él solo la decimotercera Champions League del equipo blanco. Apenas unos minutos después de proclamarse campeón, el galés no se mordió la lengua en la rueda de prensa: “me sorprendió no ser titular hoy, merecía serlo, necesito jugar más y si no es aquí habrá que buscar otras opciones”.

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Con ese incierto panorama llegó el verano mundialista y la atención se centró en lo que acontecía en Rusia. Finalizado el evento se confirmó lo que todo el mundo sabía, Cristiano Ronaldo dejaba el Real Madrid, también por la puerta de atrás, como le ocurrió a otras estrellas blancas en el pasado.

Sin un referente en ataque y con Benzema y Bale severamente cuestionados, el Real Madrid de Julen Lopetegui echó a andar la campaña y recibió el primer golpe en la Supercopa de Europa, donde cayó 4-2 ante el Atlético de Madrid. A pesar de la derrota y las críticas, se empezó a ver que ambos delanteros jugaban más sueltos, más tranquilos, y sobre todo, que el juego de equipo dejó de girar alrededor de un jugador para ser más colectivo.

La confirmación de este cambio ha llegado en la liga, con un esperanzador arranque que invita al optimismo, y donde tanto Benzema como Bale han demostrado que pueden ser importantes. Ambos están en las primeras posiciones de la tabla de goleadores haciéndole competencia -de momento- al IGNORE INTOcable Lionel Messi.

El francés y el galés se han quitado un gran peso de encima, juegan sin presión y sin la necesidad de demostrar en todo momento quienes son bajo la alargada sombra del crack portugués.

Al resurgimiento de los dos delanteros hay que unir el buen momento de los jugadores españoles de la plantilla, Isco, Sergio Ramos, Marco Asensio y Danni Carvajal, quienes demostraron que están en gran nivel, como se pudo apreciar en la última fecha FIFA ante Inglaterra y, sobre todo, ante la actual subcampeona del mundo, Croacia.

Todavía es muy pronto para vaticinar lo que puede hacer el Real Madrid este temporada, pero lo que sí parece claro es, que si las lesiones respetan, el conjunto merengue tiene una plantilla con calidad suficiente como para ser competitiva en todos los torneos en los que esté implicado. Mientras, en Turín, todos se preguntan si Cristiano Ronaldo será capaz de mantener con la ‘Vecchia Signora’ los números con los que destrozó todos los récords en la capital de España.

LatinAmerican Post | Jose María González Alonso
 

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