Manchester United y otros proyectos futbolísticos con inversionistas multimillonarios

Manchester United es una de las franquicias deportivas más valiosas del mundo. Sin embargo, los pobres resultados en Premier League, la poca figuración que ha tenido en Liga de Campeones y la ausencia de un proyecto deportivo consolidado después de la partida de Sir Alex Fergusson, han propiciado que la relación entre los dueños y la hinchada se haya fracturado. Es por esto que la alternativa de un cambio administrativo puede ser llamativa para todas las partes.

La llegada de conglomerados inversores a los equipos de fútbol ha estado lleno de matices, para clubes de poca figuración deportiva ha resultado en la mayoría de los casos positivos, mientras que para equipos históricos o de buen andar deportivo, ha sucedido lo contrario, incluso sufriendo descensos de categoría.

Manchester City, de mendigo a millonario

Finalizando el siglo XX, los ‘Citizens’ deambulaban en la tercera división inglesa, con una profunda crisis económica y deportiva a cuestas. El regreso a la Premier League del equipo celeste tardó tres temporadas, pero pese a su ascenso, no pasaba de media tabla o solo participar para salvar la categoría. En 2008, todo esto cambió cuando el Abu Dhabi United Group adquirió el equipo por 250 millones de euros.

Desde la llegada de los emiratíes y gracias a una fuerte inversión económica, el equipo de Manchester consiguió seis Premier League, tres FA Cup, seis Copas de Liga y tres Community Shield, siendo uno de los dominadores del fútbol inglés en los últimos años y animador permanente de la Liga de Campeones, de la que fue subcampeón en la edición 2020/2021.

R.B. Leipzig, de club aficionado a equipo protagonista en Bundesliga

Con apenas 13 años de historia, el Red Bull Leipzig inició su trasegar deportivo desde la quinta división alemana, en siete años logró cuatro ascensos que le permitieron llegar a primera división en 2016. Todo esto, gracias a un exitoso proceso deportivo y una fuerte inversión económica a cargo de la empresa austriaca Red Bull, dueña del equipo. Pese a sus pocos años en el profesionalismo, consiguieron una Copa de Alemania en la temporada 2021/2022 y ha sido semifinalista de la Liga de Campeones y de la UEFA Europa League.

Málaga CF, de candidato a mejor club en 2013, a pelear por no descender a tercera división

En 2010, la familia qatarí, en cabeza del jeque Abdullah ben Nasser Al Thani, adquirió el equipo español, un año después de su llegada, los ‘Blanquiazules’ lograron la cuarta posición de la Liga y pudieron acceder por primera vez a la Liga de Campeones. La temporada 2012/2013 fue la más importante de su historia, logrando avanzar hasta los cuartos de final de la competición, finalizando sexto en el torneo local y ser nominado como mejor club de la temporada.

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A pesar de lo conseguido en esas temporadas, el equipo fue sancionado por incumplimiento del fair play financiero, lo que no le permitió seguir invirtiendo en fichajes, ni poder participar en torneos internacionales. El equipo malagueño no se pudo recuperar de esa situación y en la temporada 2017/2018 colapsó deportiva y financieramente, descendió a segunda y, en la actualidad, lucha por no descender a tercera división.

AS Saint Etienne, de ser el equipo más ganador de Francia a deambular en segunda división

El equipo más histórico de Francia, ganador de diez ligas y siete copas, vivía una época de declive desde comienzos de la década del ochenta y que se acrecentó a comienzos del siglo XXI. Para recuperar el histórico pasado del equipo, llegó a su presidencia el argelino Bernard Caïazzo, magnate de las industrias de la comunicación y del marketing deportivo. A su llegada, ‘Les Verts’ regresaron a primera división y se consolidan en puestos de torneos europeos, gracias al buen proceso deportivo liderado por Christophe Galtier, actual entrenador del PSG y que estuvo al frente del Saint Etienne desde 2009, hasta 2017.

Pese a la estabilidad del proceso deportivo, apenas consiguió un título de Copa y no pudo mantener el pulso deportivo que proponían equipos como Olympique de Marsella, PSG y su archirrival Olympique de Lyon. Desde 2019, el equipo entró en crisis y los máximos accionistas (Roland Romeyer y Bernard Caïazzo) lo ponen en venta. Sin embargo, no aparecen proponentes, lo que agudiza la crisis y en la temporada 2021/2022 regresa a segunda división. Hoy, deambula en la parte media baja de la tabla y lejos de los puestos de ascenso.

Más allá de la inversión económica, un proceso deportivo debe ser integral, en donde la comunión entre inversionistas e hinchada sea alta y que se defiendan los intereses que vayan a favor del bienestar institucional, esos factores son los que determinarán el éxito o fracaso de cualquier proyecto futbolístico.