El caos se apodera de la temporada final de “Succession”

La fórmula del éxito de HBO sigue siendo la misma: alianzas, disputas internas y traiciones. Pero en esta ocasión la guerra no se desarrolla en salones medievales con un trono, sino en salas de juntas. "Succession" es un drama moderno que se enfoca en la vida de las familias adineradas que maniobran los círculos de poder en la alta sociedad. Y es que de allí parte la esencia y lo atractivo de esta serie ganadora de varios premios Emmy y Globo de Oro.

A diferencia de otras grandes producciones televisivas, la serie creada por Jesse Armstrong quiere despedirse por todo lo alto y sin la necesidad de estirar la historia más de lo necesario. Es por ello que los próximos diez episodios de su cuarta temporada bajarán el telón de una trama tan real que supera la ficción. "No quería que la audiencia se hartara de nosotros, o que pensara que íbamos a hacer una temporada tonta", aseguró en una entrevista para CNN el también guionista.

Esta sátira dramática con tonos de humor negro ha logrado mantener a la audiencia en su sillón episodio tras episodio. De hecho, un detalle que deja ver la confianza que le tiene HBO a "Succession" es que su capítulo final se emitirá el 28 de mayo, último día para la postulación a la próxima edición de los Emmy.

Divisiones y mucho caos

Todo apunta a que esta última temporada será más potente y feroz que las anteriores. Las sorpresas también serán parte del juego cuando los enfrentamientos familiares y empresariales lleguen a un punto sin precedentes, todo con la finalidad de alcanzar el poder a cualquier costo. Ninguno de los personajes mostrará escrúpulos para traicionar o vengarse, sin importar el parentesco, y eso mostrará lo despiadados e intensos que pueden llegar a ser.

A lo largo de sus episodios, muchos fuimos testigos de cómo Logan Roy manejaba su imperio televisivo, mientras que a la par, tres de sus hijos (Kendall, Shiv y Roman) se peleaban entre sí para mostrar lealtad y convertirse en el sucesor de Waystar Royco. Al final, todo eso cambió y los hermanos decidieron unir fuerzas para enfrentarse a su padre, aunque como era de esperarse perdieron la primera batalla.

Sin treguas y con todas las cartas sobre la mesa, los próximos movimientos de los Roy serán decisivos para saber quién tendrá el control total. Es en este punto cuando la división será más feroz, sobre todo cuando la venta del conglomerado de medios se acerque y provoque una angustia existencial en algunos miembros de la familia. Y es que, tal como lo ha demostrado Logan, un buen negocio siempre será más importante que la familia o los vínculos personales.

Por su parte, ajeno de todo este enfrentamiento se encuentra Connor, el hijo mayor de Logan. Su única preocupación es su campaña para aspirar a la presidencia de los Estados Unidos. Sin embargo, esa carrera política no ha sido fácil de mantener a flote y las encuestas lo demuestran con un porcentaje mínimo de aceptación. Entonces, ¿qué tantos millones de dólares estará dispuesto a gastar para darle vuelta a la situación, o hasta qué punto deberá rebajarse para conseguir la atención necesaria?

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Un padre decepcionado

Como ya sabrán a estas alturas, el principal foco de atención es Logan Roy. Ahora más que nunca siente que sus hijos no están a la altura, al punto de considerarlos como personas no serias. Según afirma el mismo patriarca de los Roy, ninguno de los tres cuenta con el material necesario para mover mercados o ganarse la lealtad de los jefes de Estado, dos factores fundamentales para estar al frente de un imperio como el de Waystar Royco.

Pero las aspiraciones de Kendall, Shiv y Roman son cada vez más ambiciosas. El detalle es que ni siquiera cuando se juntaron a finales de la tercera temporada se notó que estuvieran compitiendo arduamente, algo que siempre ha caracterizado a su padre. Justamente, la ausencia de estos tres será la principal preocupación de Logan en los próximos episodios, ya que esta nueva generación de Roys tiene una estrategia que podría inclinar la balanza a su favor.

Al final, la estructura de la última temporada de "Succession" se encargará de crear intercambios, tanto sensacionales como incómodos, de todos los participantes de este juego. ¿Podrán los hijos favoritos de Logan demostrar que están preparados para jugar con los grandes? Porque si hay algo que la serie ha ratificado es que ninguno de ellos parece estar listo para manejar el poder que tanto han anhelado.

Un final inesperado para todos

Ni los fanáticos ni los propios actores de la serie se imaginaron que la cuarta temporada sería la última. Ciertamente, Jesse Armstrong se reunió con su equipo de guionistas para planificar el porvenir de sus personajes y hasta qué altura debía llegar la historia de los Roy. Tras escribir lo que aparenta ser la mejor temporada, el guionista decidió que este se convertirá en el cierre perfecto de la trama. Sin embargo, la inesperada noticia terminó generando mucha confusión entre los miembros del reparto.

"Sentí una gran sensación de pérdida, decepción y tristeza. Pero entiendo que no lo dijeran hasta el final porque siempre hubo la posibilidad que este no acabase siendo el final", declaró para los medios Sarah Snook, quien da vida a Shiv Roy. Por su parte, Kieran Culkin, actor que interpreta a Roman Roy, se siente como un fanático que quedará con ganas de ver más: "Estoy deseando que lleguen esas peticiones que pidan diez capítulos más. Creo que daba para más, pero respeto la decisión de Jesse de cerrarla ahora", confesó en una entrevista.

Por lo pronto, esta última temporada de "Succession" llega en un momento controversial por las recientes revelaciones sobre la cadena Fox News y su principal accionista Rupert Murdoch, quien justamente es la inspiración del creador de esta serie. Y es que sin importar quién termine con el poder, esta producción ya se encuentra entre las mejores no solo de HBO, sino también de todo el siglo XXI.