Reseña de “Lightyear”: una gran película animada de ciencia ficción

Para aquellos que no lo sepan, "Lightyear" cuenta la historia del astronauta detrás del juguete que inspiró a Buzz Lightyear en la emblemática saga de juguetes. Es decir, Buzz Lightyear fue, dentro del canon de Pixar, un importante personaje real del cual se generó cierta mercadotecnia, posteriormente representada en las películas.

Esto implica que la historia es independiente de lo ocurrido en "Toy Story", razón por la cual el tono también es distinto. Aquí Pixar apostó de lleno por la ciencia ficción, con inspiraciones en películas como "Star Wars". Si bien es algo distinto de lo que se esperaba, el resultado ha sido más que satisfactorio.

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Las virtudes de Lightyear: lo nuevo de Pixar

En este sentido, lo primero que hay que tener en cuenta es que el público objetivo de este filme es otro. Si bien es verdad que los niños podrán disfrutar de esta aventura, el tono siempre parece apuntar más hacia el realismo, con un trasfondo humanista más importante que en las clásicas historias familiares de "Toy Story".

La película nos presenta a Buzz Lightyear y Alisha Hawthorne, dos compañeros que deben realizar una nueva aventura intergaláctica. Después de un accidente, la nave en la que viajan queda en un planeta hostil a más de 4 millones de años luz de la Tierra. En consecuencia, deben buscar la forma de adaptarse a él. Esta premisa es muy positiva, ya que implica que los personajes salgan de su zona de confort y deban enfrentarse a los peligros del universo. Lo cierto es que el personaje de Buzz Lightyear, al que Chris Evans presta su voz, quiere encontrar algunas maneras de solucionar su error y regresar hacia casa.

Y allí aparece otro personaje muy interesante, que no es otro que Zurg, el histórico enemigo de Buzz Lightyear en las películas. Si anteriormente hacían referencias a un paralelismo entre él y Darth Vader, como pudimos ver en "Toy Story 2", aquí se refuerzan las analogías hacia "Star Wars" y conoceremos más sobre el vínculo entre ambos personajes

Si bien la cinta está orientada hacia el público adulto, esto no significa que no exista un mensaje detrás de la historia. Por ejemplo, es claramente identificable la idea de hacerle frente al fracaso, la posibilidad de perseverar para cumplir los objetivos e incluso cuestiones relacionadas con la amistad, la familia y el amor.

En este último punto, también hay un elemento bastante destacado que dio que hablar en las redes sociales y tiene que ver con las escenas LGBT. Esto es un paso hacia delante de Pixar, que ya había coqueteado con la idea de representar escenas de este tipo, pero ahora definitivamente lo genera de una manera natural.

También el elemento del humor está muy presente, con la aparición de un personaje que se “roba” la pantalla. Hacemos referencia a Sox, el gato compañero de Buzz Lightyear, que aporta una cuota sólida de diversión en cada una de sus intervenciones. Este es el elemento más cercano a "Toy Story" de la película, sin dudas.

Otro elemento interesante radica en su animación. Ya sabemos de lo que es capaz Pixar, pero aquí parecen darle un toque mucho más cinematográfico. La idea fue generar un estilo de animación muy cercano a lo visto en "Soul", que, sin dejar de ser una película para niños, intentaba dejar un mensaje mucho más profundo y realista.

Todo esto se ve en "Lightyear", que tiene planos que recuerdan a "Interstellar". Su tono casi solemne le juega una buena pasada, pero también es verdad que los espectadores deben saber lo que van a ver. Esta cinta funciona independientemente de "Toy Story", pues esta solamente es la excusa para presentarnos una historia espacial.

De todas formas, es una aventura que necesitas conocer y que ya está disponible en cines. ¡No te la pierdas!