Mientras Daniel Ortega habla de normalización, las protestas prosiguen y los gobiernos vecinos ya se preparan para una posible ola migratoria

Mientras los estudiantes, quienes lideran las protestas, manifestaban su descontento contra el gobierno de Ortega y exigían su salida, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, entregaba sorpresivas declaraciones a la cadena FOX. En la entrevista, que tuvo lugar el pasado martes 24 de agosto, Ortega afirmó que la situación del país se estaba normalizando desde hace una semana. El mandatario además dejo claro que por el momento no se adelantarán las elecciones. Sin embargo, en los países de la región se empieza a temer una crisis migratoria.

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Una entrevista ajena a la realidad

El periodista Bret Baier del programa Special Report fue el encargado de entrevistar al mandatario nicaragüense mediante una teleconferencia, el resultado: una negación a la situación que vive el país. Para Daniel Ortega, quien durante su entrevista aseguró que la situación del país se estaba normalizando, también afirmó que no saldrá del poder hasta 2021 cuando se cumpla su mandato. Paradójicamente, en ese mismo momento, estudiantes coreaban “que se van, se van”, en Managua, León, Matagalpa y Boaco, según informo el diario El Mundo.

Desde 2009, Ortega no daba una entrevista a un medio extranjero y sorprendió al aceptar la invitación de Fox, pues al mismo estilo del fallecido mandatario venezolano Hugo Chávez, Ortega sólo acepta invitaciones de medios que apoyan a su gobierno. Ortega aprovechó para decir que el problema con la iglesia católica surge con monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua, ya que por su larga temporada fuera del país desconoce lo que el país vivió en su periodo de guerra.

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“Yo no he manifestado que hay que adelantar elecciones. Más bien, adelantar elecciones crearía inestabilidad e inseguridad, peor aún en estas condiciones", dijo el mandatario, quien llego al poder desde 2007.

Una crisis migratoria se vislumbra

No sólo las declaraciones del senador estadounidense Marco Rubio, a la cadena CNN, hablan de la posibilidad de una crisis migratoria como consecuencia de lo que se vive en Nicaragua. Rubio asegura además que una guerra civil es posible en Nicaragua, debido a la represión de las protestas que han dejado entre 277 y 351 muertos según diversas organizaciones pro-derechos humanos, incluyendo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

Por su parte, la canciller costarricense Espy Campbell, en la reciente reunión de cancilleres de los países miembros del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), celebrada en Santo Domingo el pasado 30 de junio, habló de una inminente oleada de migrantes nicaragüenses, por lo que ya se trabaja en un plan de contingencia. Según Campbell y considerando los datos de la dirección de migración costarricenses, han ingresado más de tres mil personas por semana al país huyendo de la situación de Nicaragua.

Debido a esta situación Campbell aseguró que ya trabaja con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Entre sus labores está la habilitación de dos albergues cerca de la frontera, que durante 2015 y 2016 sirvieron para atender la llegada de haitianos y cubanos.

LatinAmerican Post | Carlos Eduardo Gómez Avella
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