La canciller ecuatoriana fue nombrada en el puesto y a pesar del regocijo que esto implica para la región hay polémica

La canciller de Ecuador, María Fernanda Espinosa, se convirtió el pasado martes 5 de junio en la primera latinoamericana en ser elegida presidenta de la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU). Su candidatura generó una disputa diplomática con Honduras, cuya embajadora ante la ONU, Mary Elizabeth Flores, también luchaba por el cargo.

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La presidencia de la Asamblea General es ocupada por representantes de las diferentes regiones, y este año el turno le correspondía a América Latina y el Caribe. Por lo general, la región propone un candidato único pero este año las divisiones entre los países latinoamericanos rompieron con una tradición y no apostaran por una candidatura única, lo que provocó un enfrentamiento entre Honduras y Ecuador.

Criticas en Ecuador

La diplomática ha recibido duras críticas en su propio país por su gestión de la violencia en la frontera norte del país o su posición respecto a la situación de Venezuela o Nicaragua. Para los partidos opositores, el nombramiento de Espinosa le implica gastos al país, pues en el reglamento de la ONU se menciona que el presidente de la Asamblea General es un título honorifico y es el país del nacional quien debe correr con todos los gastos.

Desde la oposición se cuestionó que Espinosa hubiera puesto por encima de los intereses nacionales sus "caprichos y vanidades" en la candidatura a la presidencia de la ONU que "poco le interesa al país, porque las urgencias son el manejo de la política exterior, lucha contra el terrorismo y narcotráfico", publicó El Universo.

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Mujeres latinoamericanas que transitan la senda del éxito

"Quisiera rendir un homenaje especial a las mujeres que luchan cada día por acceder a puestos de trabajo en igualdad de condiciones; a las mujeres y niñas víctimas de la violencia; a las niñas y adolescentes que demandan acceso a información y educación de calidad", indicó la canciller al ser elegida.

Si bien la reciente renuncia del presidente de Paraguay Horacio Cartes fue rechazada por el Senado por falta de quorum para la votación, vale la pena resaltar el hecho que una mujer, Alicia Pucheta, era la persona que iba a sustituir a Cartes. Pucheta es la actual vicepresidenta del país, y antes de la negativa del Senado ya era prácticamente reconocida como la sucesora. Esta situación representa claramente el papel que ha obtenido la mujer en la política latinoamericana en años recientes, demostrando que su empoderamiento no ha sido en vano.

Sin embargo, no es el único caso reciente. Para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Colombia, que se llevaran a cabo el próximo 17 de junio, dos mujeres se disputaran la vicepresidencia. Un suceso extraordinario pues será la primera vez que una mujer ostentará el cargo. Marta Lucia Ramírez, formula del candidato de derecha Iván Duque, y Ángela María Robledo, candidata de la izquierda junto con Gustavo Petro, serán de manera segura un hito en un país que avanza paulatinamente al empoderamiento de la mujer.

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Mujeres en la Asamblea General

Espinosa Garcés es tan solo la cuarta mujer en setenta y tres años de historia de las Naciones Unidas en ser elegida presidenta de la Asamblea General. El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, recordó que ha pasado más de una década desde que una mujer fuera presidenta de la Asamblea General, un puesto que ocupó Sheikha Haya Rashed Al-Khalifa, de Bahrein, en la sesión 61 de este órgano.

Latin American Post | Carlos Eduardo Gómez Avella
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