Quieren más partidos: la FIFA anuncia su nuevo formato para el Mundial de Clubes

Desde hace varios años la FIFA dejó en claro su postura de cambio para el fútbol mundial, aspecto que generó nuevos formatos de torneos, los cuales están pensados únicamente en enriquecer más a los directivos del ente que regula a este deporte. El último gran movimiento se dio en el Mundial de Clubes, competencia que reúne una vez al año a los mejores equipos de cada continente. 

Con este cambio de formato, la FIFA demuestra nuevamente su idea de negocio, en la cual se centran en generar una mayor cantidad de partidos y dejan a un lado la salud de los jugadores profesionales. Estos llevan reclamando varios años sobre los calendarios en las temporadas, aspecto que parece poco importarle a los directivos del fútbol. 

La igualdad como cortina de humo 

Gianni Infantino, presidente de la FIFA, hizo oficial el cambio de formato para el Mundial de Clubes, competencia que pasará a contar con la participación de 32 equipos y se disputará cada 4 años. Así se convertirá en un campeonato del mundo, pero con conjuntos de las mejores ligas. En su mensaje, el directivo comentó, como ya es costumbre, la intención de acabar con la inequidad, la cual es considerada como una cortina de humo para tener más partidos en las distintas competencias. 

Desde su llegada a la FIFA, Infantino demostró su cara de magnate, la cual se enfoca únicamente en generar una mayor cantidad de dinero por competencia. En su discurso mezquino, el directivo comentó “En algunos lugares del mundo siempre hay muchos partidos y en otros lugares no hay suficientes. Tenemos que conectarnos al mundo y dar oportunidades a selecciones o equipos de otras partes del mundo para que puedan competir con los mejores”. 

A pesar de este discurso sobre un mundo perfecto en el deporte, la realidad apunta a todo lo contrario. Infantino dejó en claro que la intención con esta competencia es acabar con la inequidad, sin embargo, su discurso se contradice con sus propias acciones. En el nuevo formato, Europa contará con 12 cupos, CONMEBOL con 6; CONCACAF, Confederación Asiática de fútbol y la Confederación africana de fútbol con 4; y la Confederación de Fútbol de Oceanía con tan solo 1. 

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Con esta repartición de los cupos, se deja en claro que la intención de la FIFA es totalmente diferente a terminar con la inequidad. Hay una tendencia cada vez más marcada en contra del fútbol que no hace parte de la elite del viejo continente. 

Vendido al mejor postor 

Estados Unidos en los últimos años se adueñó de las competencias más importantes del fútbol. Para el año 2024, el país norteamericano será nuevamente la sede de la Copa América, competencia que ni siquiera debería contar con la participación de este país, recordando que este campeonato es únicamente para los países de Latinoamérica. A pesar de esto, por la cantidad de dinero que ofrece el realizar este torneo en esta parte del mundo, se deja a un lado la esencia del torneo. 

Para el año 2026, Estados Unidos de la mano de Canadá y de México serán sedes del Mundial masculino de mayores. Este será el segundo campeonato del mundo que se llevará a cabo en el país norteamericano, aspecto que pocos países se han dado el lujo de tener. Ahora la frutilla del postre se dará en el año 2025, en el cual esta nación albergará la primera edición de este nuevo Mundial de Clubes. 

Para acabar con las polémicas, Infantino comentó que Estados Unidos fue elegido sede por la calidad de sus estadios. “El Mundial de 2025 será la cita más destacada de la élite del fútbol profesional masculino de clubes. Estados Unidos ya reúne la infraestructura requerida y un interés enorme en todo el país, por lo que resulta el anfitrión ideal para acoger la primera edición de esta nueva competición, que se enmarca en nuestra misión de lograr un fútbol realmente global”. 

Un deporte de pobres robado por los ricos 

Con todos estos cambios en los últimos años, el fútbol se sigue transformando en un negocio prometedor, el cual parece no tener fondo y que aleja cada vez más a todos sus aficionados. Es por esto que es importante traer a colación la frase que en algún momento dijo el escritor Eduardo Galeano “A medida que el deporte se ha hecho industria, ha ido desterrando la belleza que nace de la alegría de jugar porque sí”. 

Por ahora, son pocas las opciones que tenemos los aficionados para revertir esta situación, por lo que constantemente debemos estar adaptándonos a los cambios que supuestamente se hacen en pro del crecimiento del deporte. Sin embargo, todos somos conscientes de que el único crecimiento que importa actualmente es el de los bolsillos de los dirigentes.