El lunes negro sacude a la economía global

Ante la amenaza por el Covid-19, un virus que desde diciembre de 2019 ha infectado a más de 109.000 personas, las bolsas asiáticas han sufrido las consecuencias debido al temor de la extensión del virus, sumado al pensamiento de una posible recesión. 

Este lunes se sumó un factor más al pánico en las bolsas de todo el mundo. Se trata del hundimiento del 30 por ciento en el precio del petróleo, tras la negativa de Rusia a acatar los recortes de la OPEP, tras la iniciativa de Arabia Saudita de “introducir un recorte adicional de su producción en otros 1,5 millones de barriles diarios como respuesta a la caída de la demanda por el coronavirus”, de acuerdo con Expansión. 

Ante la negativa del país europeo, Arabia Saudita decidió romper con lo acordado, generando no solo una guerra de precios, sino causando uno de los mayores desplomes del precio del petróleo desde 1991.

Con lo anterior, las bolsas de todo el mundo sufrieron un grave desplome. En la economía japonesa, por ejemplo, la bolsa de Tokio se desplomó un 5 por ciento, debido a la preocupación por la propagación mundial del coronavirus. Entretanto, la bolsa de China registró un desplome del 3 por ciento. 

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América Latina 

Como ya lo indicamos, las bolsas de todo el mundo tuvieron un desplome general y las bolsas de América Latina no fueron la excepción. En Chile, por ejemplo, el peso de este país sufrió una devaluación teniendo en cuenta que el dólar en ese país alcanzó los 845.70 pesos por dólar. De esta manera, la moneda de este país logró su mínimo histórico, mientras que el dólar superó su máximo histórico, el cual se dio en noviembre del 2019 en medio de las protestas de los chilenos contra el presidente Sebastián Piñera. 

En una línea similar, Colombia también sufrió los efectos de la llegada del Coronavirus, debido a que el 6 de marzo se confirmó el primer caso y el 9 de marzo se confirmaron dos casos más, como lo explica El Tiempo, “el índice de la Bolsa, el Colcap, marcaba una variación negativa de -7,5 % hasta -113,970”.

Además, el 9 de marzo, el dólar en ese país alcanzó los 3.800 pesos colombianos, aumentando su valor 45 pesos más de lo que se había cotizado la semana pasada. De acuerdo con La República, “en nueve semanas, el peso colombiano se ha depreciado 9,38% frente al dólar”, y de acuerdo con varios expertos se espera que el precio siga en aumento y alcance la barrera de los 4.000 pesos.

Por otro lado, en Brasil, la bolsa de Sao Paulo tuvo que suspender sus actividades debido a una caída de su principal indicador. Cuando se retomó, el índice todavía estaba en el lado negativo y se presentó un desplome del 8.88 por ciento. Uno de los más afectados, sin duda, fueron las acciones de Petrobras, una de las principales petroleras del país, las cuales alcanzaron una pérdida del 24 por ciento.  

La situación en México tampoco mejoró, pues la bolsa de ese país registró una caída del 4 por ciento, la más grave desde octubre del 2019. Asimismo, Wall Street abrió con pérdidas, pues como lo indica Semana, “el mercado bursátil neoyorquino abrió con una caída del Dow Jones de 5,83 por ciento  y una baja del Nasdaq de 7,12 por ciento”. Debido a lo anterior se tuvieron que suspender las actividades, pues ambas cayeron más del límite del 5 por ciento diario. 

La bolsa en Europa

Países como Alemania, Francia, España e Italia, uno de los países más afectados por el virus después de China, también abrieron el día con índices negativos. El Ibex 35, el índice español, cayó un 7.7 por ciento, una cifra que no se registraba desde el referéndum del Brexit. En los demás países, “Londres perdió un 7,1%; Fráncfort, un 7,3%; París, un 7,6%; y Milán, un 10,5%”, de acuerdo con El País. 

Se espera que la tendencia siga siendo negativa, debido al temor de los inversores frente a las medidas que tomen Washington en cuanto a la expansión del Coronavirus en ese país. Igualmente, se espera que la OPEP se reúna de nuevo con Rusia para tratar de frenar las consecuencias de no aceptar el trato. 

Si el país europeo no aceptara ocurriría una guerra de precios durante más tiempo, pero teniendo en cuenta el precio alcanzado ( 30 dólares) no es una solución rentable para los países que explotan este recurso. Además, dado el precio tan barato, las energías renovables que se usan como solución para no usar petróleo, también se verían afectadas ante un precio tan bajo.