Un nuevo comienzo en el escenario internacional para Nicolás Maduro
Luego de su intervención en la COP 27, Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, toma un nuevo aire ante la comunidad mundial ¿Qué se espera?
Foto: kremlin.ru
LatinAmerican Post | David Rivadeneira Soto
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Nicolás Maduro Moros, presidente de Venezuela, intervino en la Cumbre del Cambio Climático, celebrada en Sharm El Sheikh, Egipto, con un discurso con el cual busca renovar su imagen en la escena internacional. Así mismo, en el encuentro el mandatario interactuó con otros gobernantes y representantes de diversos Estados, en lo que parece ser un intento estratégico del venezolano por entrar de nuevo en las dinámicas de la diplomacia y las relaciones internacionales, suavizando la percepción ante la comunidad de naciones. Aunque no lo dijo directamente en esta oportunidad en sus palabras, es posible que el líder venezolano también pretenda allanar el camino luego de su petición, hace unos días, a Antonio Guterres, presidente de la ONU, para volver a tener voto en este organismo.
Al ahondar un poco más en los encuentros de Maduro con otros líderes, se puede hacer una revisión a las formas en las que estos se dieron, y lo que pueden significar los subtextos de estos apretones de manos. El análisis de Juan Diego Quezada, corresponsal en la región andina para el diario El País, señala que las imágenes registradas del saludo entre Emmanuel Macron y Nicolás Maduro, exhiben un acercamiento breve y cordial, en el que el mandatario venezolano fue más efusivo, mientras que su homologo mantuvo un tono más sosegado, tratando de acercarse más al hablar para hacerlo de manera más privada.
Macron, por medio de interprete, le dijo que había que conseguir “este camino”, en lo que para el corresponsal, y según parece puede ser una alusión a las conversaciones en México entre la oposición y el chavismo para acordar unas elecciones verificables y con seguimiento internacional, para la carrera presidencial del 2024 en Venezuela. Otro saludo que también se dio en la cumbre fue entre Maduro y John Kerry, el representante de Estados Unidos en la COP 27. Aunque sobre este encuentro Ned Price, el vocero del Departamento de Estado para la prensa, dijo que no fue un encuentro agendado, dejando ver que no estaba previsto y surgió de manera espontánea desde el lado venezolano.
Recuperar el voto en la ONU y otras aspiraciones de Maduro
Estos encuentros y apariciones de Maduro hacen parte de movidas en los estamentos multilaterales para hacer eco y recuperar notoriedad desde la legitimidad. El pasado 4 de noviembre, en declaraciones en medios estatales, Maduro solicito a Guterres “(…) resolver que Venezuela, teniendo el recurso, el dinero, pueda tener la cuenta bancaria para pagar y tener el derecho al voto allá en la ONU”, el cual había perdido desde enero debido a sus deudas con la organización. Estas movidas y acercamientos en la COP 27 pueden ser en búsqueda de integrarse más en la comunidad internacional, abriéndose al apoyo mundial para aliviar las tensiones internas que lo deslegitiman.
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Las condiciones actuales de Suramérica, con el viraje de varios gobiernos hacia la izquierda ha puesto el vecindario en un nuevo ambiente geopolítico, que si bien no es claramente favorable a Maduro, porque por ejemplo Boric, el presidente chileno, ha manifestado sus críticas por las violaciones de derechos humanos en Venezuela, si ha inclinado la balanza hacia la salida negociada a la crisis venezolana. De manera particular, con la llegada de Petro a la presidencia, se han retomado las relaciones con el gobierno de Maduro, rotas en la era de Duque, se han reabierto las fronteras y se ha propuesto la contención de Venezuela con el regreso a los organismos de control, la conversación con la oposición y la celebración de elecciones libres. Incluso, se han reiniciado las operaciones aéreas entre los dos países, que se inauguraron con la llegada de un Boeing 747 de la aerolínea Turpial Airlines desde Caracas a Bogotá.
El petróleo, la COP 27 y otros factores
Por otro lado, en el juego a varias bandas que es la política internacional, la guerra entre Rusia y Ucrania ha movido las fichas para volver a negociar el petróleo venezolano. Luis Vicente León, director de la consultora Datanálisis, dijo a la BBC News que "en Estados Unidos, desde hace un tiempo, las fuerzas internas han estado diciendo que la estrategia de sanciones petroleras no tenía mucho sentido después de tanto tiempo y su objetivo no estaba funcionando", por eso había empezado a notarse una vuelta de tuerca en esas políticas, pero todo a raíz de la crisis de abastecimiento y precio del crudo desatada por el conflicto ruso-ucraniano.
Finalmente, toda esa conjunción de factores que se ha mencionado, desde la guerra de Putin contra Kiev, poniendo en la lista de necesidades el petróleo venezolano, los nuevos mandatos de izquierda en Latinoamérica, las reanudaciones de las relaciones con Colombia y la reaparición de Maduro en el escenario internacional como un posible interlocutor legítimo, han abierto la puerta para que regrese a las sendas de una recuperación de los valores democráticos, aunque esto debe manejarse con mucha reserva. Maduro deberá seguir demostrando que puede escuchar, sacudiéndose de sombras como la de Nicaragua que se aleja cada vez más del respeto a la oposición y a las instituciones. Una muestra de ello sería volver al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, que forma parte de la OEA, como le solicito el presidente Petro de manera oficial hace un par de meses y otra buena acción es la declaración en la COP 27 de formar alianza con otros 9 países de la cuenca amazónica para protegerla, en propuesta también conjunta con el líder colombiano.