¿Es la felicidad la clave para la longevidad y la salud?

Las personas adultas mayores fueron sin duda algunas de las que más sufrieron durante la pandemia. Primero porque fueron la población con mayor riesgo y mayor mortalidad frente al virus, y segundo porque también tuvieron que lidiar con el distanciamiento social, que desencadenó altos niveles de depresión. Esta enfermedad se asocia con otras enfermedades como el síndrome del corazón roto e incluso suicidios. La crisis sanitaria y el confinamiento pusieron a prueba la estabilidad mental y física de las personas. A propósito de ello, un estudio de la Universidad de Harvard ha investigado por casi 80 años acerca de cómo las relaciones sanas impactan en la felicidad de las personas y esta a su vez en la longevidad.

El estudio se ha extendido por ocho décadas, lo que lo vuelve una interesante radiografía del desarrollo humano, al principio los investigadores se enfocaron en aspectos físicos y genéticos que impactan en la salud y que a la larga permiten o impiden una vida larga y sana. Con el tiempo han descubierto que los factores psicológicos y sociales son tan relevantes como los genéticos. Esto es, el entorno de la persona y sus relaciones sociales, si son sanas, impactan directamente en su calidad de vida y en la longevidad. Puede sonar lógico, pero hasta ahora era una hipótesis que no había sido probada con datos y un estudio profundo. "El hallazgo sorprendente es que nuestras relaciones y qué tan felices somos en nuestras relaciones tiene una poderosa influencia en nuestra salud", afirma el doctor Robert Waldinger, psiquiatra director del estudio.

¿Perdió relevancia la salud física para una vida larga?

Uno de los puntos más valiosos es que la salud física de las personas es tan importante como la salud emocional, una vida feliz y en un entorno motivador ayudan a las personas a prolongar su vida. Sin embargo, esto no debe entenderse como una pérdida de relevancia de la salud física, en realidad la salud integral se compone de ambos lados de la moneda. Una no puede existir sin la otra para considerarse salud, por ello el estudio también es relevante como un registro de los cambios en el enfoque que ha tenido la medicina. Al principio del estudio sólo eran hombres los estudiados, con el tiempo (y el descubrimiento del impacto de la felicidad en la salud) se ha ampliado a sus esposas e hijos para comprender mejor el papel de las relaciones personales en el desarrollo y cómo ayudan o no a alcanzar mejores niveles de salud y una vida prolongada.

También puedes leer: ¿Qué es el estrés parental y cómo manejarlo tras el regreso de los niños a clases?

La salud mental, clave

Entonces, si la felicidad es clave para tener una mejor calidad de vida, relaciones sanas y salud ¿qué efectos tiene la depresión en las personas? La depresión tiene muchas causas, una de las más relevantes es la soledad. Y aunque podría parecer inofensiva, la soledad agrava muchos de los problemas mentales más comunes y, desde luego, tiene un impacto negativo en la salud física de las personas. Los CDC estadounidenses (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades) encontraron que la soledad se asocia al aumento del riesgo de padecer enfermedades mentales como la demencia hasta en un 50%. A nivel físico los efectos de la soledad se asocian con muerte prematura, problemas cardíacos, así como complicaciones médicas que requieren hospitalización. Además claro, de los problemas más comunes en los que se encuentran los adultos mayores que viven solos como son accidentes domésticos de menor o mayor gravedad. La clave es entonces equilibrar la salud mental con la misma atención y relevancia que la salud física siendo las relaciones personales las más relevantes para crear un entorno agradable. Como último punto acerca de la soledad, hay un dicho que reza "mejor solo que mal acompañado" de ahí la importancia de establecer vínculos sanos con familia y amigos, con quienes sentirse seguros y felices, las relaciones problemáticas pueden producir el mismo o peor efecto que la soledad. 

El hexálogo para envejecer saludablemente

El psiquiatra George Vaillant, quien formó parte del estudio en los años 60, escribió un hexálogo sobre los factores que favorecen envejecer saludablemente en un libro llamado "Envejecer bien". Estos factores son: realizar actividad física (salud física); el consumo controlado de alcohol y tabaco (estabilidad física/emocional); tener mecanismos maduros para enfrentar los altibajos de la vida (estabilidad emocional); disfrutar de un peso y una salud saludables (salud física); además de un matrimonio estable (estabilidad emocional y en sus relaciones personales). Finalmente añadió un sexto: la educación. El doctor afirmó que mientras mejor educación tenga una persona disminuirá su tendencia a abusar de sustancias como el alcohol y las drogas, además de establecer mejores relaciones personales y laborales. Concluyó que mientras más factores cumpla una persona tendrá mejores posibilidades de tener una vida sana, feliz y larga, para él el pilar de todo son las relaciones con otros.