8M: Las mujeres en la música siguen luchando por la igualdad

Cada 8 de marzo, mujeres de todo el mundo salen a las calles a denunciar la desigualdad de género que se vive constantemente en todos los sectores de nuestra sociedad, una desigualdad histórica que ha dejado a su paso cifras alarmantes de violencia de género, sexual y de feminicidios. La industria de la música no es ajena a esta realidad que ha silenciado el trabajo de millones de mujeres. A pesar de que a simple vista el panorama pueda hacernos creer que actualmente hay más cabida para las mujeres en la música porque cada vez se ven más artistas que representan la variedad racial y sexual de la feminidad; lo cierto es que, en la parte técnica, en lo que pasa tras bambalinas, las mujeres todavía luchan para ser reconocidas, ocupar cargos importantes y romper la brecha de desigualdad en esta industria que además es tan competida. 

Las cifras de las mujeres en la música

Cuando se habla de composición musical, uno de los trabajos más competidos es el de la composición para cine. John Williams, Hans Zimmer, Howard Shore, Danny Elfman, Yann Tiersen; todos estos son nombres de tan solo algunos de los compositores de cine más reconocidos en la industria y en el mundo, todos con obras maestras, todos hombres. Lucía Caruso, compositora y pianista argentina, afirmó en una entrevista para Noticia ONU que las mujeres compositoras en toda la industria del cine ocupan apenas entre un 2 y 3%, y que esto quiere decir que de cada cien compositores solo dos o tres son mujeres. 

Lee también: “Mañana será bonito”, el álbum de Karol G que está rompiendo récords

Women in Music es una organización sin ánimo de lucro formada por mujeres que se han formado y trabajan en todos los ámbitos de la música, desde la interpretación de voz e instrumentos, pasando por la ingeniería de sonido, la producción, la dirección de discográficas, la agencia, la edición, la publicidad, hasta la composición. Según datos de la ONG, la industria de la música tiene un 70% de presencia de hombres, lo que implica que las mujeres solo ocupan el 30%. Además, solo el 15% de las discográficas en Estados Unidos, uno de los mercados más importantes del mundo, pertenecen a mujeres. Asimismo, los datos muestran que de las 600 canciones más populares entre 2012 y 2017, el 22% fueron interpretadas y el 17% compuestas por mujeres. Estas cifras no solo son muy desiguales, sino que también están permeadas por otro tipo de injusticias que van más allá de la desigualdad de oportunidades en los cargos.

Neet Ragoowansi, directora de la ONG, aseguró que “La discriminación, el acoso sexual, la escasez de oportunidades para el progreso profesional, la brecha salarial, la falta de visibilidad, es algo muy común en la industria de la música, y por supuesto, nos enfrentamos a los prejuicios comunes que existen contra las mujeres”. Como en la industria del cine, en la de la música nos encontramos con que las mujeres sufren las mismas injusticias y se enfrentan a retos más grandes en comparación a su contraparte masculina por el simple hecho de ser mujeres. 

Las mujeres en la música están para quedarse

A pesar de los retos que implica la desigualdad a la que están expuestas, son muchas las mujeres que trabajan en su día a día para cambiar el panorama y ocupar más espacio en la industria. Mujeres que también buscan reconocer a compositoras clásicas cuyos nombres quedaron olvidados bajo los de Mozart, Beethoven, Bach, Schubert, entre muchos más, todos hombres, algunos misóginos, no sobra decir. United Voices 4 Peace, ONG europea, lucha por recuperar esos nombre de mujeres en la música clásica universal y traer sus composiciones a la vida. La organización también busca reconocer el trabajo de compositoras y músicas contemporáneas que han sido igual de relegadas que sus antecesoras. 

Como United Voices 4 Peace o Woman in Music son muchos los colectivos alrededor del mundo que abrazan a mujeres en la industria de la música y luchan por avanzar hacia un escenario en donde las condiciones sean justas y las oportunidades iguales. Asimismo, son muchas las artistas ya reconocidas que han volcado su mirada y las temáticas de sus canciones a una lucha con cortes feministas, denuncias hacia los malos tratos dentro y fuera de la industria y letras y ritmos que invitan a celebrar a las mujeres, su sexualidad, su diversidad.